La Fiscalía informa que se trata de fallos judiciales en los que fueron condenadas cuatro personas por su responsabilidad en los delitos de ilícito aprovechamiento de los recursos naturales, daño a los recursos naturales agravado y explotación ilícita de yacimiento minero.
Transporte de animales sacrificados
La Fiscalía General de la Nación demostró en juicio, que Rodolfo Toro Yaya y Raúl Tique Alvis fueron los responsables del ilícito aprovechamiento de los recursos naturales.
El día 21 de octubre de 2018, en un retén de la Policía Nacional en la vía Paipa-Tunja, fue detenido el camión en el que se movilizaban los procesados. Al verificar el contenido de la parte trasera del automotor, las autoridades descubrieron que transportaban pescado para consumo humano, pero debajo hallaron otro tipo de carne roja que, por su composición y características, parecía Chigüiro. Establecieron que se trataba de 164 animales sacrificados para consumo humano; al menos 3.5 toneladas de carne que tenían como destino la capital del país. El cargamento ilegal era procedente de Paz de Ariporo (Casanare), y los hombres no contaban con permiso o autorización para el transporte de tales especies silvestres con los fines determinados.
Por estos hechos fueron judicializados los dos hombres y se dispuso la incautación de vehículo. Los procesados suscribieron un preacuerdo con la Fiscalía, por lo que en primera instancia el Juzgado Quinto Penal del Circuito de Tunja los sentenció a 24 meses de prisión, la cual fue ratificada por el Tribunal Superior de esa ciudad.
Explotación de carbón en páramos
El Juzgado 4 Penal del Circuito de Tunja emitió, en primera instancia, sentencia condenatoria en contra de Luis Aníbal Muñoz Romero, por los delitos de daño a los recursos naturales agravado y explotación ilícita de yacimiento minera, a una pena de prisión domiciliaria ocho años y multa de 200 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
La información oficial de la Fiscalía dice que los hechos que determinaron esta decisión datan de 2017, cuando un grupo interinstitucional de medio ambiente hizo presencia en la vereda Parroquia Vieja de Ventaquemada, donde se estaba realizando la explotación de carbón mineral, en la bocamina denominada “El Maná”, y con ello estaba ocasionando daños al medio ambiente. Durante el operativo fueron capturadas en flagrancia cinco personas que, desde diferentes roles, adelantaban la irregular explotación de carbón.
Durante el juicio oral se comprobó que el propietario y financiador de la explotación ilícita era Luis Aníbal Muñoz Romero, quien realizaba de manera intermitente esta actividad desde 2013 y que se le había negado la licencia ambiental. Determinaron que no contaba con título minero y la extracción de este producto se venía realizando en inmediaciones del Páramo de Rabanal, por lo que el lugar era un ecosistema protegido.
Explotación de materiales a cielo abierto
El Tribunal Superior de Tunja confirmó la sentencia en contra de José Fidel Garavito Vargas, por el delito de daño a los recursos naturales. En la decisión, se condena al procesado a 5 años de prisión y multa de 3.106 salarios mínimos mensuales legales vigentes.
El ente acusador también demostró en juicio que en la vereda El Carmen, zona rural del municipio de Cómbita, entre 2007 y 2014, Garavito Vargas realizó, como propietario, sobre un área de 18.9354 metros cuadrados la explotación a cielo abierto de materiales de construcción, lo que generó graves el daño a los componentes del medio ambiente: hídrico, suelo, flora, fauna y paisaje. En este caso, el condenado presentó recurso extraordinario de casación, por lo que será la Corte Suprema de Justicia quien tome la decisión definitiva.
