Este es uno de los temas que causa mayor polémica en referencia a la administración de la nueva terminal, sin embargo la junta directiva de la Sociedad Pública conformada para asignar el modelo operativo y administrativo asegura que este modelo es el más viable pues la terminal aún requiere una gran inversión de recursos.
Un gran revuelo va a causar en las próximas horas y en los próximos días el anuncio de que la concesión de la nueva terminal de transporte terrestre de pasajeros de Tunja se realizaría por término de 20 años, lo que resultará excesivo ante los ojos de algunos.
Sin embargo, tan prolongada concesión se daría así porque la terminal requiere de grandes inversiones, que hoy el sector público no tiene como respaldar. Como tal serían 11.500 millones de pesos.
Para dicha concesión se estipularía que a quien se le adjudique deberá invertir 7.500 millones de pesos el primer año, 2.000 millones en el tercer año y otros 2.000 en el antepenúltimo año, que se utilizarían para la renovación del mobiliario.
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Desde la sociedad pública aclaran que quien aspire a ser el concesionario, deberá tener depositado en Fiducia la primera inversión, que servirá para realizar las obras complementarias de la terminal.
El proceso licitatorio para concesionar la terminal podría durar alrededor de tres meses.
