El Hospital Universitario de Tunja busca ser un referente de excelencia médica al servicio del departamento y el oriente colombiano.
La Gobernación de Boyacá por medio de la Secretaría de Salud, anunció junto al Hospital Universitario San Rafael de Tunja, el alcance de una serie de logros significativos en el campo de la salud, que son el resultado de un trabajo en equipo dedicado a mejorar la calidad de vida de la comunidad boyacense.
«Hemos puesto en funcionamiento la remodelada Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos, una sala de cirugía completamente renovada y hemos ampliado y equipado de manera moderna el servicio de urgencias», indicó la secretaria de Salud Departamental, Lyda Marcela Pérez.
Según la funcionaria, en el gobierno de Boyacá, bajo el liderazgo de Ramiro Barragán, las acciones no se limitan únicamente a inversiones en infraestructura, sino que también se enfocan en fortalecer el recurso humano y colaborar con todos los actores involucrados en el sistema de salud.
Por otra parte, la secretaria informó que, «en cuestión de semanas comenzará la construcción de la primera etapa de la torre de alta complejidad en el Hospital San Rafael, un proyecto que marca un hito importante en la mejora de la infraestructura de atención médica en Boyacá».
Pérez señaló al respecto que el Gobierno Nacional cofinanciará a partir de $65.000 millones de pesos, esa torre del Hospital, lo que implica que allí deberán, «implementar un plan de contingencia, ya que la construcción se realizará en el mismo lugar donde actualmente se brindan los servicios de urgencias».
El Hospital Universitario San Rafael, ubicado en Tunja, celebra la iniciativa asociada a su nueva área de urgencias, posible gracias al compromiso y esfuerzo de Germán Pertuz, gerente de la entidad, su equipo de trabajo y al apoyo de la Secretaría de Salud del Departamento.
El gobernador Barragán expresó que la antigua área de urgencias no cumplía con las condiciones de comodidad y dignidad que merece la comunidad, a pesar de contar con los mejores especialistas y médicos, y que los pasillos y las camillas congestionadas eran una lamentable realidad para quienes buscaban atención médica inmediata.
«Aquella nueva área de urgencias se destaca por su comodidad, camillas y sillas especiales, iluminación óptima y un piso de calidad superior. Este cambio beneficia no solo al Hospital, sino también a la experiencia de los pacientes que buscan atención médica», agregó el mandatario.
Este avance es solo el inicio de un proyecto mayor para el Hospital San Rafael: lo que sigue es la construcción de la torre de urgencias.
«La licitación para la primera fase está a punto de adjudicarse, y se espera que, con el respaldo del Gobierno Nacional, las fases subsiguientes se ejecuten en los próximos meses», indicó Barragán.
El objetivo es convertir al Hospital San Rafael en un referente de excelencia médica al servicio de los boyacenses y en el mejor del oriente colombiano.
Por su parte Pertuz manifestó su agradecimiento al Gobernador y a su Secretaria de Salud, por liderar este proyecto, «estos logros son el resultado del trabajo en equipo en pro de la vida y la salud de la comunidad boyacense», finalizó el gerente.
*Con información suministrada por Unidad Administrativa de Comunicaciones y Protocolo / UACP / Gobernación de Boyacá.
Como siempre ha sido la línea del actual gobierno departamental, desde Amaya: Adjudicar a dedo. Ojalá no esté la firma cuyo dueño es el Esposo de una funcionaria que labora en la Secretaría de Salud de Boyacá. Porque se rumora, se han ganado más del 80 % de los proyectos de construcción hospitalaria en el Departamento, desde Canelones hasta Puerto Boyacá. Más temprano que tarde tendrán que explicarle a la Fiscalía,» la de verdad», no la que le tiene miedo al Sr Amaya y Barragán según parece, porqué una sola firma es la dueña del presupuesto de construcción hospitalaria, como si en el Departamento y el país no existieran profesionales idóneos para participar y construir. Eso es favorecimiento y es ilegal.
Definitivamente, estos dos gobiernos, amos y dueños de lo público, generaron un espacio de corrupción contractual, que no para. Seguramente la interventoría será la misma que adelanta el 70% de los procesos de control de las obras. Porqué? los demás no son sus amigos.
Pero todavía con sombreritos y asaditos y musiquita, pretenden apoderarse del Departamento por secula seculorum.