Colombia llega a Lima con la misión de clasificar a Rusia, hay varios resultados que clasifican al equipo colombiano, pero la mayor virtud de los dirigidos por Pékerman debe ser la serenidad.
Colombia pudo clasificarse al Mundial de Rusia 2018 con varias fechas de anticipación, pero pagó caro el exceso de confianza en la eliminatoria más compleja del mundo.
Ante Paraguay, Colombia logró ponerse en ventaja a 11 minutos del final; tenía que conservar esa ventaja por un tiempo mínimo, pero no fue capaz. El desorden y la anarquía prosperaron en la cancha, Colombia mostró una muy mala imagen y terminó perdiendo.
Con un empate Colombia estaría sellando su clasificación si Chile cae ante Brasil y si Paraguay no golea por siete goles a Venezuela; resultados bastante lógicos. Es decir que Colombia debe centrarse en conservar el resultado, debe jugar con el desespero del rival, que está un punto por debajo, y, que verá con el pasar de los minutos y el marcador en cero, como la tribuna empieza a jugar en contra.
Pero para Colombia no será fácil, por lo menos si hace lo mismo que hizo contra Paraguay, donde no fue capaz de conservar su arco en cero por diez minutos; en Lima deberá hacerlo desde el arranque hasta el final.
Fútbol y talento hay, y aquí es donde es importante que el técnico logre transmitir el mensaje de tranquilidad a sus dirigidos. También será necesario que tipos de recorrido y trayectoria, como Abel Aguilar, sepan asumir el mando, el liderato que tanto extrañó Colombia ante Paraguay a la hora de buscar orden.
