La invitación es para asistir y darle la voz al cuerpo y las emociones a través de Biodanza (una pedagogía de integración física y emocional), para manifestar el profundo deseo humano de vivir, de poner el cuidado de la vida en este proceso, y gozar del derecho a una vida en paz.
En la danza de la vida (significado de Biodanza) todas las personas caben en una misma ronda, caminan y se encuentran en pares o grupos al ritmo de la música, para sanar cuerpo, mente y emociones de las heridas de un triste pasado, para sintonizar con el profundo deseo de amor por la humanidad, desde la acción y el encuentro con otros.
Decenas de profesores de Biodanza se han unido para regalarle a los colombianos en una sesión de Biodanza, la posibilidad de re-conectar con la alegría de vivir en paz, de descubrir que unidos se cuida de la vida de todos, de sentir la grandeza de amar y perdonar. Este encuentro ofrece la certeza de sentir que en las manos de todas y todos está el cambio.
Todos los seres humanos cercanos a la capital, están llamados a este movimiento para hacer una gran ronda y a biodanzar por la paz. El único requisito en querer encontrarse con otros seres humanos, sin juicios, sin palabras desgastadas, sin agendas ocultas, sin otro propósito que vincularnos.