El carisma del exgobernador y candidato presidencial Carlos Andrés Amaya sumado a una ‘maquinaria’ muy bien aceitada con numerosas entidades públicas manejadas por sus aliados, lograron lo que muchos habían pronosticado: que sería el ganador absoluto de las elecciones en Boyacá. No solo logró casi 200 mil votos en el departamento para su candidatura presidencial sino que mantuvo dos curules en la Cámara para el Verde y propició la elección de Carolina Espitia en el Senado.
La mayoría de los observadores políticos en Boyacá e incluso quienes no entienden mucho de los intríngulis de las mecánicas electorales sabían que Carlos Andrés Amaya Rodríguez iba a ganar las elecciones del domingo. Lo que nadie tenía claro y qué generaba mucha especulación en oficinas y mentideros políticos era cuántos votos lograría a la Presidencia, si mantendría las dos curules para su sector político en la Cámara y si lograba ‘coronar’ la aspiración de Carolina Espitia en el Senado.
Amaya rompió los pronósticos más optimistas de sus seguidores en el departamento y les calló la boca a sus contradictores.
Para la Presidencia Amaya logró 192.988 votos en el departamento, eso es el 84 por ciento de los votos depositados por los candidatos del Centro Esperanza en Boyacá para el primer cargo de la Nación, superando contundentemente a Sergio Fajardo (13.618 votos); Juan Manuel Galán (9.096 votos); Alejandro Gaviria (7.028 votos); y Jorge Enrique Robledo (4.340 votos).
Como referencia, Gustavo Petro, ganador del Pacto Histórico a nivel nacional con 4’478.028 votos, obtuvo en Boyacá 89.379 votos; mientras que Federico Gutiérrez, ganador del Equipo por Colombia, logró en Boyacá apenas 22.004 votos).
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Es decir que en Boyacá Carlos Amaya conquistó más del doble de la votación de Petro y casi 10 veces la votación de Federico Gutiérrez.
Pero ¿por qué esa votación tan abrumadora de Amaya? Porque muchos todavía recuerdan sus realizaciones como gobernador, porque otros esperan que un boyacense pueda llegar a la Presidencia de la República después de más de 60 años en un que un paisano no ha estado en el Primer cargo de la nación y porque los que estaban haciendo campaña por Amaya a la Presidencia no solamente eran los de su partido, el Verde, sino de otras corrientes políticas como el Partido de la U, de Jairo Castiblanco; Natalie Manrique Abril, del ASI, muchos liberales de la línea disidente del liberalismo como el de Jorge Eliécer Cortés y diputados de Cambio Radical, del MAIS y del Partido Conservador que fueron y han sido ‘bien tratados’ por el Gobierno departamental.
Pero, además, porque el Partido Verde, en el sector de Carlos Amaya, y sus aliados políticos manejan la mayor parte de las entidades públicas del departamento, incluyendo el Gobierno departamental, los institutos descentralizados como la Lotería, el Ideboy, la Secretaría de Aguas, el Instituto de Tránsito de Boyacá, La Licorera del departamento, las corporaciones autónomas, el Sena, los hospitales y ejercen influencia sobre más de la mitad de las alcaldías de Boyacá.
Es decir, Amaya tiene argumentos, discurso y carisma pero, además, está respaldado por la más grande burocracia que jamás un político ha tenido en el departamento.
Por esas mismas razones Amaya logró el apoyo mayoritario hacia sus candidatos a la Cámara, Wilmer Castellanos y Jaime Raúl Salamanca, y para su gran amiga y aliada Carolina Espitia Jerez hacia el Senado.
Castellanos viene de ser alcalde de Cambio Radical, pero se convirtió en unos de los mejores amigos de Amaya y por eso fue nombrado en un alto cargo de la Secretaría de Infraestructura del departamento. El exalcalde de Sutamarchán demostró también un gran carisma y le ayudó al partido Verde a conseguir nuevos aliados, en zonas como la Provincia de Ricaurte.
Por su parte Jaime Raúl Salamanca ha sido amigo de Amaya desde la época en que los dos eran líderes estudiantiles de la UPTC. Amaya dice de Salamanca que es ‘su amigo, su mentor y su pana’.
Y con Carolina Espitia, la nueva senadora de la República, la amistad es mucho más profunda. Amaya dice que Carolina es como su hermana y ella dice que él es su amigo más grande.
Los cuatro, Amaya, Castellanos, Salamanca y Espitia, tienen en común que son egresados de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, UPTC.
Termina entonces un cuatrienio en el que el sector político Verde de Carlos Amaya tuvo un senador, Jorge Eduardo Londoño; y dos representantes a la Cámara, Wílmer Leal y Neila Ruiz; y comienza otro en el que Amaya demostró que tiene el poder y los votos para elegir a sus reemplazos: ahora son Carolina Espitia, Wílmer Castellanos y Jaime Raúl Salamanca.
Sin duda se mantiene la hegemonía del sector de Carlos Amaya en Boyacá; ahora solo falta que logre mantener la Gobernación logrando que los boyacenses también elijan dentro de año y medio al sucesor de su aliado, Ramiro Barragán.
Tal vez Carlos Amaya regrese para aspirar a ese cargo, o tal vez quiera decir quién debe ser. El tiempo dirá, en el segundo semestre del 2023, si Amaya tiene poder también para eso.
La ciudad mas grande de Boyacá es Bogotá. Carlos Amaya su Próximo alcalde. A montar negocios de Ruanas en Todas las localidades de la fria Bogota.