El gobierno de Wilson Castiblanco Gil ha intervenido más de 300 kilómetros de vías rurales en Samacá para mejorar su condiciones de rodadura y acceso, enfocándose en ramales donde no se adelantaron estas labores en años. Con la llegada probable del fenómeno de La Niña, se resalta la importancia de mantener limpias cunetas y alcantarillas para garantizar la movilidad y comercialización agrícola.
En los últimos 22 meses, el gobierno de Wilson Castiblanco Gil ha intervenido más de 300 kilómetros de vías rurales en Samacá, cumpliendo una ambiciosa estrategia llamada: «Caminos rurales, una puerta al desarrollo». Esta iniciativa busca mejorar y mantener las vías rurales, ramales y accesos a viviendas en las 11 veredas del municipio en perfectas condiciones.
El mandatario local está convencido de que estas obras son fundamentales para el desarrollo por lo que se han intervenido ramales que no recibieron mantenimiento desde hace años, aplicando recebo con la maquinaria adquirida por el municipio valorada en más de 4.250 millones de pesos.
Esta labor es liderada por Sergio Ramírez, jefe de maquinaria de la Alcaldía de Samacá, quien coordina un equipo de 20 personas que trabajan las 24 horas del día, siete días a la semana, para garantizar la movilidad incluso en temporada invernal.
Para el último trimestre del año, y ante la alerta sobre la alta probabilidad de que se presente el fenómeno de La Niña, caracterizado por un aumento en las lluvias y un descenso en las temperaturas, se hace más necesario el mantenimiento de las vías rurales.
Ante este panorama el alcalde Castiblanco Gil hizo un llamado a las juntas de acción comunal para que realicen de manera permanente la limpieza de cunetas y alcantarillas, para que los trabajos se mantengan y la movilidad para la comercialización de productos agrícolas que producen los campesinos en Samacá se realice de manera ininterrumpida.