MinAmbiente anunció la delimitación del Páramo Guantiva – La Rusia que abastece de agua a 16 municipios del departamento.
Una buena noticia recibió el territorio boyacense al conocerse la delimitación de un nuevo páramo que sin duda aporta al desarrollo de agua y vida. Con este anuncio se benefician más de 266 mil habitantes de Boyacá y Santander.
Esta área protegida cuenta con una extensión de más de 119 mil hectáreas ubicadas en 16 jurisdicciones de Boyacá y 6 de Santander, y surte de agua a 4 distritos de riego y acueductos de la región. Además, brinda servicios a través de riquezas naturales como Santuario de Fauna y Flora Guanentá, una zona con una diversidad de vida innegable.
“Con la delimitación de Guantiva-La Rusia pondremos los recursos naturales al servicio de los emprendimientos verdes, que podrán beneficiar a más de 266.200 habitantes de la región. Este páramo además es un gran ejemplo de participación comunitaria, ya que muchos de sus habitantes son ahora sus guardianes”, expresó Luis Gilberto Murillo, ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Por su parte, el presidente de la República, Juan Manuel Santos celebró esta noticia, ya que considera de gran importancia las declaratorias de áreas protegidas en el país.
“Anunciamos la delimitación del páramo Guantiva–La Rusia, llegamos a 23 páramos delimitados, de los 37 que tiene el país y que son símbolo de nuestra riqueza natural. Tenemos cerca de 24 millones de hectáreas de áreas protegidas, terminaremos este gobierno con 26 millones, un área superior a Gran Bretaña. Estamos protegiendo lo más importante que tiene la humanidad que es el agua”, agregó Santos.
Para el 15 de julio del año en curso, se dará a conocer en el marco del Congreso Internacional de Páramos en Bogotá, la delimitación del páramo de Sumapaz, considerado el más grande del mundo con un área de más de 315 mil hectáreas.
Los municipios boyacenses beneficiados con esta iniciativa son: Cerinza, Duitama, Floresta, Nobsa, Paipa, Paz de Río, Santa Rosa de Viterbo, Sativanorte, Sativasur, Soatá, Sotaquirá, Susacón, Tipacoque, Belén, Betéitiva y Tutazá.
Lo importante por encima de la delimitación es el ordenamiento del territorio, con respeto por los recursos naturales y el medio ambiente. El gobierno debe invertir en la reubicación de la población campesina que por necesidad viene haciendo uso de ecosistemas frágiles como este Páramo con actividades agropecuarias. La sostenibilidad es el fin real.