Durante ocho días de trabajo conjunto, comunidades, autoridades locales y el Ministerio de Ambiente lograron consensos clave para avanzar en la delimitación participativa del Páramo de Pisba.
Tras ocho días de trabajo continuo con las comunidades locales y autoridades municipales de Sácama, Támara y La Salina (Casanare), y Labranzagrande (Boyacá), se desarrolló la fase de concertación para la delimitación del Páramo de Pisba. Con este avance, ya son cuatro de los trece municipios vinculados al proceso con los que se han logrado progresos significativos en esta delimitación participativa, liderada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Como resultado, se alcanzaron consensos razonados sobre aspectos relacionados con la delimitación del páramo con base en el área de referencia propuesta a escala 1:25.000; los lineamientos para la sustitución y/o reconversión de actividades; el sistema de fiscalización; los parámetros o medidas de protección de fuentes hídricas; la instancia de coordinación, y el modelo de financiación.
“En estas mesas de diálogos deliberativos se dio una participación muy activa de la comunidad y de las instituciones que estuvieron presentes. Esta fase de concertación la seguiremos desarrollando en los otros nueve municipios de Boyacá”, señaló Jairton Díez Díaz, asesor de la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible (e), Irene Vélez Torres.
Las primeras jornadas de concertación, realizadas en Sácama (28 de septiembre), Támara (1 de octubre), La Salina (3 de octubre) y Labranzagrande (4 de octubre), permitieron:
Dialogar en torno a la propuesta de delimitación del Páramo de Pisba, abordando los seis temas ineludibles y ampliando la información necesaria para facilitar acuerdos y la toma de decisiones.
Adoptar decisiones conjuntas entre actores sociales e institucionales, logrando acuerdos razonados sobre los seis temas de diálogo prioritarios para la delimitación
de este ecosistema estratégico.
El Ministerio de Ambiente anunció que continuará abriendo espacios de diálogo en los nueve municipios restantes de Boyacá, con el propósito de avanzar de manera colectiva con las comunidades y autoridades en la delimitación participativa del Páramo de Pisba, garantizando la protección de uno de los ecosistemas más importantes para el abastecimiento hídrico del país.
