Mineros y líderes políticos hicieron presencia en este evento que hizo referencia a todo lo relacionado con la producción de esmeralda en el mundo.
Boyacá es de los territorios líderes en producción de esmeralda a nivel nacional e internacional, y ahora con la formalización del sector en regiones como el Occidente y el Valle de Tenza, está tomando un nuevo aire luego que épocas pasadas, la lucha por el poder de dicho renglón económico desató violencia y sangre generando un episodio denominado como “guerra verde”.
Las nuevas perspectivas de la producción esmeraldera en el territorio boyacense fueron expuestas en el Segundo Simposio Mundial de la Esmeralda, un escenario ideal para narrar el proceso que ha llevado una provincia como el Occidente en donde ya no se habla de ‘grandes capos’ sino de una nueva manera de impulsar el desarrollo de la región tomando como punto de partida las garantías laborales para los llamados ‘guaqueros’ y los pequeños y medianos productores.
Charles Clifford, presidente de Minería Texas Colombia, multinacional que opera en el Occidente, expresó que esta fue una oportunidad de mostrar todo lo que se ha hecho en torno a la esmeralda.
“Tuvimos un panel de expertos que hicieron unas ponencias que aportaron a la creación de un imaginario diferente de la producción de esmeraldas, esto es muy importante para la industria ya que marca nuevas pautas de los beneficios que otorga hacer minería de una manera adecuada”, indicó Clifford.
Edwin Molina, presidente de Aprecol, afirmó que tanto compradores como amantes de esta piedra preciosa muestran interés sobre los procesos de producción lo que generaría otra alternativa de turismo.
Uno de los puntos principales del evento fue la responsabilidad ambiental en la minería, para el caso, el gobernador Carlos Amaya sigue sentando posturas frente al tema afirmando que el departamento está trabajando para hacer minería bien hecha.
“La industria esmeraldera de hoy está demostrando que es posible su desarrollo y progreso, en el marco de la protección ambiental y responsabilidad social. Como hijo de Boyacá, tierra con un enorme potencial esmeraldero, quiero reiterar también mi visión: La actividad minera siempre debe caminar siendo respetuosa del ambiente”, agregó Amaya.
Por su parte, el representante a la Cámara y oriundo de Chiquinquirá Héctor Ángel Ortiz, aseveró que la formalización de la producción de esmeralda en el Occidente coadyuvó a que esta siga teniendo un impacto a nivel mundial.
“Los productores que ya se muestran competitivos a nivel internacional se encuentran formalizados. Se están siguiendo al pie de la letra todas las normas que impone la Agencia Nacional de Minería y el Ministerio de Ambiente, lo que genera que se pueda trabajar con tranquilidad”, sostuvo Ortiz.
Por último, el precandidato a la Gobernación y exdiputado Jonatan Sánchez reiteró que se siguen adelantando acciones en la región para continuar fortaleciendo al sector.
“Hay que proteger nuestros ecosistemas buscando siempre el cumplimiento de las normas medioambientales, pero también es necesario, brindar garantías para que la producción minera se realice con responsabilidad y vocación de territorio”, finalizó Sánchez.
Según Oscar Baquero, presidente de Fedesmeraldas, la industria se ha mantenido como un dinamizador de la economía de Boyacá y el país, debido a que otorga más de 3.000 empleos directos y 12.000 indirectos.
Además de los mencionados, hicieron presencia en la jornada académica el senador Ciro Alejandro Ramírez, alcaldes del Occidente, entre otros.
