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A través de mensajes de Whatsapp y otras redes se difundieron mensajes en los que se invita a una jornada de protesta que se realiza hoy o desde hoy debido a la situación que están atravesando cultivadores de cebolla y tomate por la importación de esos productos. “Realicen manifestaciones, pero, por favor no bloqueen”, les dijo ayer el gobernador, Carlos Amaya.
Agricultores de Boyacá, Cundinamarca, Norte de Santander y Nariño, dedicados a la producción de cebolla, tomate, arveja, mazorca y otros productos están ‘cocinando’ desde el fin de semana la realización de una jornada de protesta que incluya bloqueo a carreteras y ciudades de Boyacá y del país.
Ayer, después del medio día se escucharon en Paipa insistentes rumores sobre un nuevo bloqueo a esa ciudad y se habló de posibles taponamientos de carreteras hasta el Puente de Boyacá, lo que ocurriría desde la noche del domingo o la madrugada de este lunes 2 de enero, pero hasta ahora no hay versiones oficiales de quienes invitan a la movilización.
Quienes convocan a esa nueva jornada de protesta dicen que desde el 2 de diciembre se dejarán pasar solo productos agropecuarios y ambulancias y que para el paso de los vehículos con alimentos se solicitará un apoyo de los dueños de la carga en los puntos de encuentro y un aporte por parte de los transportadores.
Y aseguran: “pedimos disculpas por las molestas causadas y esperamos poder llegar a un acuerdo lo más pronto posible para el beneficio del sector agrícola”.
Una nueva protesta, comenzando en mes de diciembre y las festividades de fin de año sería una pésima noticia para el departamento, pues comerciantes, sectores vinculados al turismo e industriales esperan que este mes sea la oportunidad para recuperarse de un año de dificultades, en los que se han registrado por lo menos dos paros más, con bloqueos de vías y cierre de localidades.
Mensaje del gobernador, @CarlosAmayaR , suplicando que no se realicen más bloqueos de vías. «El departamento no aguanta un bloqueo más», dijo el mandatario. pic.twitter.com/fG4K0gHlqO
— EL DIARIO BOYACÁ (@ELDIARIOBOYACA) December 2, 2024
Este año hubo paro de transportadores contra el incremento de los precios del ACPM y bloqueo a Paipa de los campesinos del páramo, que dejó millonarias pérdidas a comerciantes y hoteleros de esa ciudad y del centro del departamento.
Desde el Puente de Boyacá en donde se encendía la iluminación navideña, el gobernador, Carlos Amaya, lanzó ayer una voz de alerta sobre las implicaciones que tendrían nuevos bloqueos de vías.
“Hago un llamado de corazón a los cebolleros, a quienes entendemos y respaldamos; pero el departamento no aguanta otro bloqueo, menos en temporada decembrina, en la que estamos esperando miles de turistas. A ellos les cuento que ya hay un camino de diálogo para buscar soluciones”, escribió el Mandatario.
“Les pido de todo corazón, por vida suyita, que no nos bloqueen. Sé la situación que están atravesando los cebolleros y los productores de tomate por las importaciones y los precios bajos que les están generando pérdidas, pero la economía de Boyacá no aguanta un bloqueo más”, dijo Amaya.
También indicó el Gobernador que se abrieron canales de diálogo de manera virtual y que el jueves 5 de diciembre se tiene prevista una reunión con los ministros de Comercio y Agricultura para hablar de los efectos dañinos que están causando esas importaciones. “Pueden hacer manifestaciones, las respaldamos, pero, por favor, no más bloqueos”, insistió el Mandatario.
Según el Gobernador, en las últimas horas ha hablado con voceros de los agricultores y su petición es que no bloqueen vías.
Anoche el periódico EL DIARIO conoció mensajes de audio que se distribuyeron por Whats App, en los cuales dirigentes en los que se informaba de reuniones y se informaba que la concentración se realizaría en la salida de Paipa. Otros dicen que los bloqueos se realizarán en el Puente de Boyacá.
Quienes convocan este nuevo paro dicen que por las importaciones de cebolla y tomate han estado perdiendo dinero pues el Gobierno está permitiendo el ingreso de productos agropecuarios de Ecuador, que no pagan impuestos en Colombia.
