Los campesinos del lugar cuentan que hace 50 ó 60 años, eran tradicionales estas nevadas durante los primeros días de diciembre, pero no habían vuelto a caer. Lo que ocurrió el fin de semana generó alegría y nostalgia, pero también esperanza de que el nevado se pueda recuperar o al menos de que se detenga el deshielo.
Un gran cantidad de visitantes y lugareños fueron testigos el fin de semana de una de las nevadas más espectaculares de los últimos tiempos en el sendero Ritacuba Blanco en la Sierra Nevada de Güicán, en el Parque Nacional Natural EL Cocuy.
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“Un regalo de esperanza con algo de nostalgia por lo que conocimos hace 35 años; gracias Dios por permitirme volver a vivir esta maravillosa experiencia con personas que amo y aprecio mucho”, escribió el fotógrafo Luis Lizarazo.
Este tipo de fenómenos eran muy usuales hace 40 o 50 años, especialmente durante los primeros días de diciembre.
En esa época el hielo de la Sierra Nevada de Güicán tenía una extensión de varios kilómetros cuadrados, pero con el paso de los años esa capa blanca se ha reducido dramáticamente.
Lizarazo dijo que algunos lugareños se ilusionan de que la Sierra nevada pueda recuperar la majestuosidad que algún día tuvo o que, por lo menos, el deshielo no se siga acelerando.
