El proyecto de ley de páramos está muy cerca de hacerse realidad. Ya cursó los debates necesarios en el Congreso de la República y ahora solo espera la sanción presidencial.
Esto, que es un alivio para una amplia porción de la población, se ha convertido en un motivo de angustia para miles de agricultores y mineros que ejercen sus actividades en zonas que terminarían incluidas en la delimitación de los páramos, también para muchos líderes políticos como alcaldes, que saben que gran parte de sus municipios está en zona de páramo, por lo que se ha llegado a decir incluso que algunos de estos municipios desaparecerían. Sin embargo, esto no va a ser así, la ley contempla alternativas y trabajo articulado entre Gobierno Nacional, autoridades municipales, y población directamente afectada para conseguir una reconversión o reubicación laboral.
Al comienzo de esta semana el Presidente de la República oficializó la delimitación de cuatro páramos, completando así 34 de los 37 que existen en el país.
Santos comentó que esto es un gran avance en materia ambiental, ya que asegura la protección de “esas fábricas de agua que son los páramos”. Pero son varios los sectores poblacionales los que no toman este anuncio de la mejor manera ya que ejercen sus actividades productivas en zona de páramo, y con esta ley, en caso de aprobarse, ven claramente amenazado su sustento y su forma de vida.
Por eso, durante las diversas discusiones que conllevó la aprobación de este proyecto de ley por parte del Legislativo, intervinieron varios actores sociales inmersos y directamente afectados por el mismo. Entre ellos el ministro de Medio Ambiente, Luis Gilberto Murillo, quien solicitó un plazo de diez años para reubicar o redefinir las actividades de las familias afectadas por la delimitación de los páramos.
Para el caso de Boyacá, se contó también con la participación del gobernador Carlos Amaya, quien aseguró estar dispuesto a realizar una inversión de dos mil millones de pesos para llevar a cabo dichos procesos de reubicación o redefinición. Pero advirtió que para esto se haga realidad, es necesario realizar mesas técnicas en las que se definan prioridades, planes de acción y actividades alternativas para quienes verán afectada su actividad economía con la delimitación.
Por su parte, la ley contempla que “el gobierno Nacional será el encargado de compensar económicamente a los Gestores de Páramos del país a través de las Organizaciones Autorizadas de Gestores de Páramos, con una asignación mensual entre medio y un salario mínimo legal vigente, dependiendo del área de conservación. Para estos efectos el Gobierno Nacional podrá realizar alianzas con el sector privado para adelantar proyectos de conservación, preservación y restauración de los ecosistemas de páramos.
El Gobierno Nacional deberá desarrollar mecanismos de compensación para los entes territoriales que cuenten en su territorio con áreas de páramos delimitadas y categorizadas. Adicionalmente se deberá compensar los procesos de conservación, preservación y restauración. El Gobierno Nacional podrá establecer incentivos y/o exenciones tributarias a las empresas privadas que participen en los programas de conservación, restauración y preservación de los ecosistemas de páramos”.
Conociendo a esta situación, Luis Gilberto Murillo expresó “desde el ministerio estamos abiertos al diálogo, los escucharemos a todos. Conocemos todos los argumentos sobre los páramos en todo el país. Todas las inquietudes de la comunidad las trataremos
de incorporar en el marco legal.
Hemos avanzado en la delimitación de las zonas de páramo y ya hemos avanzado en la nueva ley de páramos que establece que estas áreas se conservan con la comunidad”.
La compleja situación social y económica que se avecina para miles de pobladores de las zonas de páramo, causó reacciones de varios de los alcaldes, que solicitan al Gobierno Nacional, no abandonar a los municipios que se verán afectados.
Henry Arguello
Alcalde de Monguí
Quiero contarles que Monguí forma parte de los complejos ecosistémicos de Mama Pacha-Vijagual y Pisba donde ya está delimitado el primero y pendientes de la delimitación del segundo. Así que no hemos hecho sino producir agua para los dos departamentos, Boyacá y Casanare, y no hemos recibido nada. De los 500 kms cuadrados del municipio solo 25 nos sirven. Por eso queremos inversión; que los campesinos que cuidan los páramos reciban el apoyo para que permanezcan allí”.
Edgar Cristancho
Alcalde de Gámeza
Me invade la tristeza porque el 78% del municipio es páramo y por eso dicen que vamos a desaparecer como municipio; no entiendo por qué se ensañan con nosotros, si lo único que hacemos es trabajar. Si se quieren mantener las zonas protegidas, necesitamos subsidiar y ayudar a nuestros campesinos. Necesitamos proteger en lo posible la minería y la agricultura que ha sido nuestra actividad por generaciones, pero si tenemos que cambiar, lo justo es que nos ayuden. No nos pueden tratar así, no nos pueden desplazar de la noche a la mañana. Tengo que defender mi gente, mis campesinos, los mineros”. El funcionario reclamó a los medios de comunicación por decir que el municipio se va a acabar. ¡Eso no es cierto!, enfatizó.
Nelson García
Alcalde de Tasco
Quiero manifestar que como autoridad estamos sometidos al estado social de derecho; lo digo porque las dificultades que tenemos los alcaldes no nos permiten generar alternativas. Sin embargo, queremos que el turismo sea la alternativa. Que a esta hora, antes de firmar la delimitación del páramo, estuvieran los proyectos productivos y las actividades que remuneren a nuestros campesinos antes de dejar sus actividades tradicionales”. “Lástima que ustedes se vayan sin haber trabajado sobre las alternativas para que la población tenga ingresos y oportunidades”, les reclamó a los funcionarios del alto gobierno que estuvieron en Socha.
Carlos Cuevas
Alcalde de Jericó
Quiero decir Ministro que muchas gracias por su presencia, pues queremos exigir loa derechos que de la constitución como el desecho al trabajo y a vivir con dignidad campesinos y mineros. El gobierno nos quiere desplazar. No estamos en contra de la protección del medio ambiente pero no queremos que nos desplacen ni que no nos permitan vivir de nuestra tierra hoy estamos unidos y resueltos a luchar por nuestras comunidades y nuestros hijos no queremos ir a las ciudades a los cinturones de miseria”.
Alberto Rincón
Alcalde de Belén
En Belén hay Páramo pero no minería, pero la gente vive del agro, por eso cualquier determinación nos perjudica, así que mucho cuidado con las decisiones”.
Óscar Ávila
Alcalde de Cómbita
Defendemos el Páramo y somos responsables ambientalmente, pero estamos hoy con los campesinos de Cómbita a quienes debemos apoyar para que sigan en su territorio, en el páramo; debemos proteger a nuestros coterráneos; son 600 campesinos que se afectan, que tienen que tener compensación”.
Diego Sandoval
Secretario de Gobierno de Socotá
Las veredas altas de Socotá son las más olvidadas, dónde no se puede abrir una carretera, por lo que la gente está aislada. Más del 84% del territorio de esas veredas es páramo; queremos planes de desarrollo turístico que reemplacen las tradicionales actividades. Aceptamos la delimitación sí, pero no así”.
María Castro
Concejala de Socotá
Que el gobierno nos permita la titulación de nuestros predios. ¿Qué va a pasar con nosotros? ¿Van a invertir en casas, en carreteras, en empleo, en oportunidades con las artesanías? Queremos que los que cuidamos recibamos. Dice Corpoboyacá que la frontera agrícola no se expanda, pero solo usamos el suelo para cultivar lo que necesitamos, pero no tenemos caminos ni oportunidades. Que no nos acose el gobierno, no queremos que nos desplacen”.
Edgar Estepa
Concejal de Socha
Para decirles y exigirles (a las instancias del gobierno) que paren las medidas arbitrarias contra los campesinos y los mineros; si fuera una multinacional mandarían la fuerza para defenderlos. El problema social en el municipio no se soluciona cerrando la minería y prohibiendo la agricultura. Si nos toca volver a la lucha lo haremos, nadie nos va a desplazar”.
Don Modesto
Habitante del páramo de Socotá
Que va a pasar con los predios que tenemos en la zona de páramo; qué pasa con los caminos y las instituciones (las escuelas). Que no nos desplacen; no nos dicen váyanse pero nos acosan todos los días. ¿Por qué nos acosan si lo único que hacemos es cuidar el páramo? El Páramo está acostumbrado a nosotros. Hoy estamos peor que hace 200 años, con resoluciones de escritorio nos quieren sacar, nos devaluaron las tierras, pero de a aquí no nos corren”.
Concejal Chita
¿Qué va a pasar en este municipio con las comunidades a más de 3.500 metros, con las escuelas, con las tierras que son nuestras; con las viviendas y acueductos que no nos los respetan? No podemos comerciar la tierra por falsa tradición. Aquí nos tienen que escuchar y respetar”.
Concejal de Gámeza
Aquí hace 20 años nos desplazaba la guerrilla ahora lo hace el gobierno; Gámeza tiene el 85% de páramo; no nos pueden desplazar. Necesitamos el permiso para pasar la carretera hasta las veredas lejanas, por la Ruta Libertadora. Ayer por grupos al margen de la ley y hoy por la ley, somos desplazados”.
Alfonso Saade
Asesor de Fenalcarbón
Antes de la firma de la resolución de la delimitación del páramo, debe escucharse a todos los voceros comunitarios, tal como lo dice la corte; todo debe hacerse con las comunidades, bajo los principios de justicia distributiva, participación en la delimitación, desarrollo sostenible y principio de precaución. Que se convoque una mesa de trabajo técnico y jurídico”.
Gabriel Chiquillo
Presidente de Fenalcarbón Boyacá
La minería del Carbón está atrapada en la estigmatizacion. Debemos llegar a la conclusión de que la vida es solo posible si producimos, es decir, si hacemos agricultura y minería. La minería en la región tiene más de 800 explotaciones, con más de 500 profesionales y trabajo no calificado. Anunciamos que trabajamos en soluciones con un fondeo para cuatro ejes fundamentales”.
