Aún se desconoce el uso que se le dará al inmueble adquirido durante la administración anterior para la reubicación de algunos vendedores informales.
Cerca de finalizar el primer mes del año se ha dado la primera reunión entre Alcaldía de Tunja y algunos representantes del comercio informal en la capital boyacense.
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La Administración Fúneme se ha fijado el objetivo de reubicarlos, labor que fue imposible para la anterior administración, que optó por la adquisición de un inmueble que solo sirve para la reubicación de 40 vendedores informales.
El gran objetivo es la erradicación de la venta ambulante, y aunque hasta ahora se desconocen pormenores de los planes de reubicación, el ambiente es positivo, pues los informales han querido brindar su confianza a un gobierno que de momento parece comprometido a brindarles una solución.
La primera reunión permitió fijar un cronograma para la discusión de aspectos más específicos.
