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Es una ciudad pequeña pero con frecuencia hay trancones, originados principalmente por quienes estacionan sus vehículos al lado y lado de las vías. La Secretaría de Tránsito local no tiene la logística para controlar el problema y hay dificultades en casi todos los sectores de la ciudad.
La Avenida Los Libertadores de Paipa es un completo caos porque se ha convertido en parqueadero de tractomulas y camiones, unos que necesitan cargar o descargar materiales de las ferreterías y otras que tienen la vía como estacionamiento.
Los conductores y propietarios de esos vehículos incluso los dejan abandonados por varios días, para descansar de sus largos viajes o para realizar gestiones en otras ciudades de Boyacá.
Esas tractomulas y camiones mal estacionados originan grave peligro para quienes deben pasar de un lado a otro de la vía y ya han producido accidentes, porque reducen la visibilidad, tanto para los peatones como para los conductores de los vehículos que utilizan el paso por la ‘doble calzada’.
El segundo problema se presenta cada vez con más frecuencia en Paipa es el de los vehículos, automóviles, camperos y a veces carros de carga pesada que se estacionan desordenadamente en las vías urbanas, generando caos en el tránsito.
El parqueo de carros, en algunas ocasiones en ambos costados, genera que muchas veces los visitantes a Paipa no puedan circular. Una ciclorruta establecida hace algunos años por la calle 24, pasando por el Parque Jaime Rook, no es respetada por nadie y de manera frecuente es utilizada también para parquear.
En muchos sectores de la ciudad hay parqueaderos, pero los propietarios de vehículos no quieren pagar y prefieren estacionar en las calles para ahorrarse los 2.000 pesos que cuesta una hora de parqueo, más barato que en cualquier otra ciudad de Boyacá.
Por eso son frecuentes los trancones y las Secretaría local de Tránsito no tiene la capacidad logística para realizar el control.
En el sector del restaurante El Tamanaco, por donde salen o ingresan los visitantes a Paipa que se movilizan hacia el Lago Sochagota, las piscinas municipales o los hoteles, mucha veces no hay como pasar porque los vehículos son estacionados peligrosamente al lado y lado de las vías.
El martes de esta semana por poco hay una pelea entre dos conductores porque ninguno de los dos daba paso debido a que en dos costados estaban ocupados por vehículos particulares mal estacionados. Ojalá algún día las autoridades locales puedan ejercer el control que les corresponde.
