Alarmante resultado de una auditoría realizada por la Superintendencia de Salud al Hospital Regional de Sogamoso. Aunque hay hermetismo sobre la manera como manejan ese hospital, se detectaron numerosos hallazgos que comprometen presuntamente la transparencia en la administración en el hospital por parte de su gerente Sheila Fanory Caicedo Rincón.
Los pacientes del Hospital Regional de Sogamoso corren riesgo como consecuencia de la mala administración y la negligencia de las directivas de esa institución, mientras que el personal médico y asistencial realizada su labor en condiciones laborales precarias.
Esas son algunas de las conclusiones de una auditoría realizada por la Superintendencia Nacional de Salud, en la que se detectaron irregularidades en diferentes frentes administrativos y de prestación de los servicios.
En auditoría de la Superintendencia Nacional de Salud al Hospital Regional de Sogamoso, empresa social de estado, se encontró que el servicio de urgencias no cumple la atención de manera integral, continua y oportuna, poniendo en riesgo la salud y la seguridad de los pacientes.
La institución no garantiza la atención integral de las mujeres gestantes, poniendo en riesgo la salud de las madres.
La institución no diligencia correctamente las historias clínicas de los pacientes.
La institución no tiene buenas prácticas en la seguridad de los pacientes.
La Institución no garantiza la prestación del servicio de cirugía programada de manera oportuna poniendo en riesgo la salud de los usuarios.
La farmacia es liderada por una bacterióloga cuando la norma establece que debe ser un químico farmacéutico. Se encontraron medicamentos vencidos, y entre los inventarios y la contabilidad no se refleja una realidad financiera.
Se encontró que la Gerente contrató medicamentos con sobrecostos y no fue eficiente en el uso de los recursos, considerando que compra medicamentos a los proveedores a un precio muy superior a la venta realizada a las entidades responsables de pago, como es el caso del “Surfactante pulmonar 3.0 ML” cuya compra por unidad fue de $4.066.808 y se vende a las ERP por un precio máximo de $1.778.000 y del “Surfactante pulmonar 6.0 ml” con precio de compra por $2.088.750 y de venta de $1.746.000.
Pero, además de la mala administración, que pone en riesgo la vida y salud de los pacientes, la gerente, Sheila Fanory Caicedo Rincón, es señalada de precarizar las condiciones laborales y personal misional.
En ese hospital ‘reinan’ las odontólogas; pues el cargo de gerente es realizado por una odontóloga; la subgerente científica también tiene esa profesión y la asesora en calidad y programas especiales también es profesional en odontología.
La farmacia es liderada también por una bacterióloga, cuando la norma establece que debe ser un químico farmacéutico. Quizás por eso se encontraron medicamentos vencidos, y entre los inventarios y la contabilidad no se refleja una realidad financiera.
El Hospital Regional de Sogamoso, Empresa Social del Estado, contrata personal misional a través de Empresas de Servicios Temporales, incumpliendo el artículo 103 de la Ley 1438 de 2011.
Hace dos meses los médicos de urgencias están pidiendo audiencia a la Gerencia y a la temporal que los contrata para que mejoren las condiciones laborales, no solo de salario si no de seguridad para los médicos que laboran en urgencias (que son víctimas frecuentes de agresiones y no ha sido posible concretar una cita.
Entre el personal del Hospital ya se sabe que los profesionales más capacitados, de mayor experiencia, se va retirando buscando mejores condiciones y el hospital queda con médicos recién salidos que van a estar unos meses o años mientras consiguen algo mejor.
Además, en ese esquema de contratación, un médico con 20 años de experiencia gana los mismos $20.000 pesitos la hora que un médico con un mes de experiencia.
El 19 de octubre de 2023 se desarrolló el ‘Diálogo con la Supersalud’ en el municipio de Sogamoso en cabeza del Superintendente Nacional de Salud. En esa ocasión, ante las constantes quejas que expresaron usuarios, pacientes y trabajadores, se solicitó a la Superintendencia una auditoría integral para conocer la situación real en la prestación de servicios de salud de ese hospital.
La Superintendencia llevó a cabo la auditoría desde el 27 de noviembre hasta el 1 de diciembre de 2023 con el objeto de Verificar el cumplimiento de las responsabilidades del Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado en relación con los ejes de financiamiento, administrativo legal y prestación de servicios para la vigencia 2022 y lo corrido de 2023.
Se determinaron 33 hallazgos muy delicados que comprometen la trasparencia en la administración en el hospital por parte de su gerente, Sheyla Fanory Caicedo Rincón, el subgerente administrativo y financiero Diego Fernando Fuquen Fonseca; la subgerente científica Claudia Marina García Fernández.
También quedó cuestionada la trasparecía de la revisora fiscal Sandra Patricia Sarmiento Acevedo y de la jefe de control interno Lina María Espinel Aguirre y de Lady Milena Zea Guerrero, líder del proceso de farmacia, que no tiene el perfil ni es apta para ocupar el cargo.
Lo que determinó la auditoría es que esos funcionarios con altos salarios no han hecho su trabajo como corresponde:
Otros de los gravísimos hallazgos detectados son:
El servicio de urgencias no cumple la atención de manera integral, continua y oportuna poniendo en riesgo la salud y la seguridad de los pacientes.
La institución no garantiza la atención integral de las mujeres gestantes, poniendo en riesgo la salud de las madres.
La institución no diligencia correctamente las historias clínicas de los pacientes.
La institución no tiene buenas prácticas en la seguridad de los pacientes.
La Institución no garantiza la prestación del servicio de cirugía programada de manera oportuna poniendo en riesgo la salud de los usuarios.
Se encontró que la Gerente contrató medicamentos con sobrecostos y no fue eficiente en el uso de los recursos, considerando que compra medicamentos a los proveedores a un precio muy superior a la venta realizada a las entidades responsables de pago, como es el caso del “Surfactante pulmonar 3.0 ML” cuya compra por unidad fue de $4.066.808 y se vende a las ERP por un precio máximo de $1.778.000 y del “surfactante pulmonar 6.0 ML” con precio de compra por $2.088.750 y de venta de $1.746.000.
La facturación de la institución solamente coincide en un 43% con la información reportada por las entidades responsables de pago.
La institución tiene cuentas por cobrar del año 2014 y en adelante.
La institución solamente ha destinado el 2,3% del presupuesto para mantenimiento incumpliendo la norma que establece que debe ser el 5%. Esto es notorio en las instalaciones físicas y los equipos biomédicos.
La institución no entregó toda la información requerida incumpliendo la obligación de reportar toda la información de manera trasparente.
La junta directiva no se reúne periódicamente según la norma, por este motivo la gerencia no tuvo ningún control por parte del máximo órgano de la institución.
Existieron grandes irregularidades en la contratación de: personal misional, de la empresa Servitemporales SAS. La institución no hizo el manual de contratación y no publica los contratos en la plataforma Secop.
Entre las conclusiones del informe de auditoría se determinó que Una vez realizada la auditoría en las instalaciones y efectuada la revisión de la documentación e información aportada por esta, se concluye que el Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado:
No garantiza la atención integral, oportuna, segura y continua en el servicio de urgencias, toda vez que, se identifican pacientes hospitalizados con estancias prolongadas, áreas mínimas de circulación, en la sala de observación de urgencias hacinamiento sin implementación del protocolo de plan de emergencia por la sobreocupación del servicio.
Con relación a la atención en salud de la población materno perinatal no garantiza una atención integral, toda vez que el Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado no cuenta con atención preferencial para las gestantes, no realiza el seguimiento de manera permanente y nominal a las cohortes de gestantes, ni se garantiza la anticoncepción post evento obstétrico y post aborto; asimismo, no cumple sus obligaciones relacionadas con la adherencia a los protocolos y guías de práctica clínica para la atención de las emergencias obstétricas.
En cuanto al buen diligenciamiento de las historias clínicas, se evidenciaron registros clínicos sin el cumplimiento de las características básicas establecidas de calidad del dato en la historia clínica y sus anexos.
El Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado presenta fallas en lo relacionado con la seguridad del paciente, toda vez que se observan practicas inseguras en los procesos de atención en los servicios de salud, dado que no implementa las Buenas Prácticas de Seguridad de Pacientes de obligatorio cumplimiento.
Con relación al servicio farmacéutico se identificaron medicamentos, dispositivos e insumos médicos vencidos, sin método de control de fechas de vencimiento, sin control de inventarios y existencias en los servicios asistenciales y carros de paro.
Administrativo legal
La Junta Directiva del Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado no se reúne ordinariamente con la periodicidad que señala la norma.
No tiene implementada la metodología para el reconocimiento técnico para el cálculo de la provisión contable de los procesos judiciales, conciliaciones extrajudiciales y trámites arbitrales
Presuntamente contrató con Empresas de Servicios Temporales sin encontrarse en alguno de los casos taxativamente establecidos en la normatividad laboral para la contratación de este tipo de empresas.
No garantiza que los contratos de prestación de servicios de salud cumplan en su totalidad con el contenido mínimo de los acuerdos de voluntades para la prestación de servicios y tecnologías en salud.
No tiene definido en la Resolución nro. 398 del 25 de septiembre de 2023, las funciones y la periodicidad en la que debe reunirse el Comité Asesor de Contratación.
No realiza la publicación de los contratos en el Sistema Electrónico de Contratación Pública (SECOP)
Financiero
El Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado no cumple con la ejecución y/o utilización del porcentaje mínimo del 5% del total de Ingresos del presupuesto, para mantenimiento de infraestructura y dotación hospitalaria para la vigencia 2022.
No tiene actualizado su manual de políticas contables de conformidad con el marco de contabilidad aplicable al Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado.
Existe ineficiencia en las actividades de depuración contable y permanente de su cartera, al tener giros pendientes de aplicar a sus cuentas por cobrar desde la vigencia 2014, además en el reporte de la Circular Conjunta 030 de 2013 con corte a junio de 2023 presenta una baja coincidencia factura a factura con las entidades responsables de pago.
Presenta diferencias entre las existencias de inventarios y lo registrado en el sistema de información del Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado, por lo cual se concluye que no refleja la realidad financiera de este rubro dentro de los estados financieros.
No cuenta con un sistema contable que le permita registrar los costos de los servicios ofrecidos.
El Hospital Regional de Sogamoso Empresa Social del Estado maneja de manera ineficiente los recursos al adquirir medicamentos a los proveedores a un precio superior a la venta realizada a las entidades responsables de pago.
Realiza pagos a terceros con soportes incongruentes y/o errores que no describen de manera correcta el hecho económico objeto del pago.
Veedores cívicos elevaron todas estas presuntas irregularidades a los diferentes entes de control: Contraloría General de la República, Procuraduría General de la nación y Contaduría General de la Nación.
Igualmente exigieron de parte de la Asamblea Departamental de Boyacá un debate de control político a la Secretaría de salud de Boyacá y al Hospital Regional de Sogamoso ESE para que rindan cuentas y explicaciones sobre tan gravísimo informe de la Superintendencia de Salud.
