Angustia es lo que le produce a don Mauricio esta casa antigua en el centro de Tunja, que por su estado y las constantes lluvias, podría llegar a ocasionar graves daños y está al lado de su vivienda. No lo deja dormir tranquilo.
La casa que le causa «un fuerte dolor de cabeza» a Mauricio Naranjo y según él, a los vecinos del sector, está ubicada en la calle 18, entre carreras 7 y 8, en pleno centro de la capital boyacense.
Este inmueble está «pegado» a su vivienda, que es tres veces menor en altura, «quiero denunciar esta casa antigua en estado de abandono y de ruinas; en lo que he averiguado la dueña sería una señora que está fuera del país», comentó Naranjo, quien es asesor inmobiliario.
El denunciante cuenta que ya ha acudido a las autoridades competentes sin encontrar una respuesta satisfactoria para lo que «a todas luces», a juzgar por las fotografías adjuntadas, es un riesgo para quienes transitan y viven en esta zona.
«Hemos pasado derechos de petición a la Alcaldía, a Control Urbano, Planeación, Desastres, pero no han hecho nada para mitigar el riesgo de colapso del inmueble», manifestó Naranjo.
Desde la Administración se estarían «lavando las manos», tal cual lo expresa este ciudadano que ya está cansado con la situación que atraviesa, ya que señala que le han dicho varias veces que no sería de su responsabilidad y quienes hicieron la visita (cuando él requirió vía derecho de petición) llenaron un formulario a mano como respuesta. Él iba a reclamar al respecto, pues le pareció que no era la manera, pero se «aburrió» de que no le pongan cuidado.
«Cuando llueve eso se escucha en la otra casa que se caen las paredes, eso está pa’ derrumbarse; pero de la Alcaldía fueron y resulta que dijeron que no, que eso no se cae (que es de ladrillo y eso no pasará); pero todos los días caen escombros a la calle, lo más «berraco» es que se caiga una pared de esas, porque por el frente pasan colectivos, taxis, carros particulares, personas, mucho estudiante del Colegio de Boyacá también», cuenta don Mauricio.
El llamado a la Alcaldía es casi de súplica, «para que se hagan cargo de eso, que les pongan, como en otros lados, tejado de lámina, madera que la sostenga».
Poca gente mira hacia arriba en este punto de la capital, ni siquiera él mismo lo hizo (tiene aproximadamente unos 20 metros de altura), de lo contrario dice sinceramente que no hubiera comprado esa casa (de amarillo con verde y que presenta una humedad hace tiempo y bastante considerable en los últimos días), cuando salió del barrio en el que vivía que «se llenó de ladrones». Y ahora con mucha preocupación deja entresalir que, «ni para ponerla en venta».
Mauricio vive solo, de vez en cuando llegan sus hermanas, le acompañan dos perros y un gato, «ahí llego a ratos, tengo mi ropa, una cama, sala, lo que cabe en un piso, pero como estos días ha llovido tanto, ya me da miedo irme a quedar allá».
El día que tembló fuerte estaba ahí y tuvo que irse para donde su mamá. También le han dicho que es «muy exagerado», que nada ha de suceder, por eso nadie responde.
Y habría que sumarle, que algunos vecinos suyos estarían queriendo apropiarse de esa casa, que cercan el andén, y la estarían desvalijando con pretensiones personales.
Esta denuncia llegó al periódico EL DIARIO de Boyacá con el comienzo, hace ocho días, de la sección ‘Mi barrio a Diario’. Si usted tiene alguna queja en su sector puede comunicarse vía WhatsApp al número de celular: 311 7177445; o por medio del correo electrónico: periodicoeldiarioboyaca@gmail.com
