La protección de la biodiversidad hace parte de la conciencia ambiental de los habitantes de nuestro territorio.
Es así, como un habitante de la comunidad rural de San Luis de Gaceno encontró en la ribera del Río a un ejemplar infantil de oso melero (Tamandúa tetradactyla), lo rescató y entregó a la Policía, que reportó el caso a Corpochivor.
Los profesionales de la Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Corporación recibieron a este ejemplar y dedicaron cuidado especial a su crianza por las condiciones neonatales.
En ello es clave el manejo de la temperatura corporal y el suministro de una dieta especializada que suple los requerimientos de su temprano estadio de desarrollo, ya que en la naturaleza este animal es completamente dependiente del cuidado de la madre.
La tamandúa del sur u oso melero es una especie de la biodiversidad colombiana que se alimentan de hormigas y termitas, gracias a las garras grandes que utilizan para romper estructuras rocosas, así como su lengua larga y pegajosa que puede penetrar en los hogares de estos insectos y lamerlos.
También se sabe que ocasionalmente comen miel, abejas y frutas. El oso es una especie solitaria, excepto en época de cría, que actualmente está siendo afectada por la pérdida y fragmentación de su hábitat, el atropellamiento masivo debido a su hábito nocturno, los incendios provocados y la depredación por perros.
