En el primer trimestre de 2022, 679 familias adquirieron su vivienda en las cuatro principales ciudades del departamento.
Las ventas de vivienda nueva en el departamento de Boyacá muestran un buen comportamiento en el inicio del año.
Durante los tres primeros meses se comercializaron 679 unidades habitacionales, lo que se traduce en una inversión superior a los 111.000 millones de pesos por parte de los hogares. De acuerdo con Coordenada Urbana, sistema de información de Camacol, el primer trimestre de 2022 es el mejor inicio de año desde 2017, solo superado por el 2021 año en el que se registró un efecto rebote por la pandemia COVID 19.
El 78 por ciento del total de unidades vendidas corresponden a viviendas del segmento VIS (precio inferior a 135 millones de pesos), las cuales mostraron un ajuste anual del -25%, con un total de 530 unidades, es decir 177 unidades menos que en 2021.
Sin embargo, al compararlo con el comportamiento del primer trimestre de 2020 se refleja un crecimiento del 71,5 por ciento. Por su parte, la venta de vivienda en segmentos medios y altos mostraron un decrecimiento del -46,6 por ciento, con 149 unidades comercializadas, es decir 130 menos que un año atrás.
De igual forma, al compararlo con el primer trimestre de 2020 persiste una caída del 29 por ciento. La ciudad de Tunja lideró el mercado de vivienda con 349 unidades comercializadas, 236 VIS y 113 No VIS, reportando una caída del 41,7 por ciento anual pero un crecimiento del 35,3 por ciento respecto a 2020.
En las ciudades de Sogamoso, Duitama y Paipa se comercializaron 158, 108 y 64 unidades respectivamente, explicando cada una el 23,3 por ciento, 16 por ciento y 9,4 por ciento del total en el departamento.
Por segmentos, la composición de las ventas fue del 89 por ciento para vivienda social (143 en Sogamoso, 95 en Duitama y 56 en Paipa), y el 11 por ciento para vivienda NO VIS (15 en Sogamoso, 13 en Duitama y 8 en Paipa). Refiriéndonos solo al mes de marzo del 2022, se vendieron 235 unidades habitacionales, 196 del segmento social y 39 del segmento No VIS.
Por ciudades las ventas se distribuyeron así: Tunja 147, Sogamoso 44, Duitama 26 y Paipa 18. Lanzamientos. La generación de nueva oferta fruto de la salida al mercado de nuevos proyectos o nuevas etapas en proyectos existentes ha estado reducida; en el primer trimestre del año se lanzaron 296 unidades, 176 unidades menos que el promedio de los últimos 6 años, lo que se traduce en una disminución del -37,3 por ciento. Por segmentos los lanzamientos registrados fueron de 198 unidades VIS y 98 No VIS.
Iniciaciones a 31 de marzo se habían iniciado a construir 109 viviendas en los cuatro principales mercados de Boyacá, 32 VIS y 77 No VIS, con un área total de 8.924 metros cuadrados, área significativamente inferior a los 42.000 m2 que se iniciaron a construir en el primer trimestre de 2021, lo cual repercute directamente en la generación de empleo y la demanda de insumos, indicó Ana Elvia Ochoa gerente regional de Camacol Boyacá y Casanare.
Esta situación la corrobora el DANE en cifras recientes publicadas sobre ocupación de mano de obra en Tunja: mientras que en diciembre de 2021 el sector empleó a 6.059 personas de forma directa, en febrero de 2022 el registro fue de 5.754 ocupados, es decir una pérdida de 305 puestos de trabajo en dos meses, concluyó Ochoa.
El sector de la construcción tiene un gran potencial para combatir el desempleo, se estima que por cada unidad de vivienda que inicia construcción se generan 5,6 puestos de trabajo, 2 de forma directa y 3,6 de forma indirecta y por cada 100 metros cuadrados que se inician a construir en destinos no residenciales, se generan 2 puesto de trabajo directo.
A través de Coordenada Urbana se tiene registro de 23 proyectos con porcentaje de ventas superior al 70 por ciento de las unidades, es decir proyectos que estarían próximos a iniciar construcción que suman 1.832 unidades habitacionales y podrían generar 3.664 puestos de trabajo directo en el corto plazo.
Sin embargo, las condiciones macroeconómicas, los costos de los materiales y demoras en trámites, han generado retrasos importantes en los inicios de obra. Desde Camacol trabajamos de manera articulada con el Gobierno Nacional, las entidades territoriales regionales y locales y entidades relacionadas con el sector constructor para gestionar las condiciones adecuadas para el desarrollo de los proyectos y el impulso a la generación de empleo en la región.