Se unen los Gobiernos de los dos departamentos y las alcaldías de Pajarito y Recetor para adelantar obras que permitan comunicar a las dos regiones mientras se superan inconvenientes de la Carretera del Cusiana. El clima en la zona ha mejorado, pero el Invías señala que sería infame trasladar trabajadores al lugar porque la montaña se les puede venir encima.
“La montaña se sigue moviendo”, advierte el Instituto Nacional de Vías, Invías, sobre lo que viene ocurriendo desde hace una semana en el sector de La Granja, en la carretera del Cusiana, entre Sogamoso y Aguazul, que generó el cierre definitivo de esa vía.
Aunque el clima en la zona ha mejorado y en los últimos cuatro días no se han presentado lluvias, el deslizamiento de tierra y piedras continúa, lo que genera grave riesgo para los equipos de trabajo que se puedan desplazar al lugar para tratar de superar los problemas de bloqueo de la carretera.
En las últimas horas la regional del Invías en Casanare reportó que en el sector de La Granja, cerca a Pajarito, se presentó un derrumbe de más de 8.000 metros cúbicos de montaña, que taponó por varios minutos el río Cusiana. “Afortunadamente el río está desplayado y rápidamente se generó un nuevo rumbo del caudal. Ese gran derrumbe se presentó en un día totalmente soleado, pero esa situación ayuda a entender los riesgos de la montaña y el peligro que representaría disponer equipos de trabajadores en un talud inestable y saturado de agua”, dijo Arcenio Sandoval Barrera, director regional del Invías para Casanare.
El funcionario informó que, en coordinación con las Gobernaciones de Boyacá y Casanare, las oficinas de Gestión de Riesgo de los dos departamentos y las alcaldías de Recetor y Pajarito, se está evaluando la posibilidad de habilitar una vía alterna por el trayecto Pajarito-Recetor-Curisí, por donde podrían transitar únicamente automóviles y camionetas, pero que permitirían facilitar el comercio entre las dos regiones y superar el aislamiento del municipio boyacense de Pajarito.
Durante el fin de semana Sandoval Barrera hizo un llamado a quienes continuamente dan su opinión sobre lo que ocurre con esta vía a unir esfuerzos para dar soluciones y a evitar versiones que generen aún más incertidumbre. Expresó Barrera que desde cuando comenzó la emergencia hace casi ocho días, expertos en hidráulica, hidrología y geotecnia del Invías, de Corporinoquía, de Gestión de Riesgo de Boyacá y Casanare y de las Gobernaciones de los dos departamentos han estado analizando la situación y buscando soluciones.
Advirtió que el Instituto Nacional de Vías tiene la capacidad técnica para atender la emergencia pero aclaró que debido a la inestabilidad del terreno no se han podido trasladar equipos de trabajo para dar vía. “Seríamos infames si enviamos a nuestros trabajadores, exponiéndolos a que la montaña se les venga encima”, dijo.
Finalmente recordó que todos los días de esta semana han visitado el lugar para evaluar la situación y que se instaló un puesto de mando unificado en Pajarito para hacer seguimiento y evaluar la situación para determinar cuándo se pueden comenzar los trabajos. “Tenemos la capacidad para intervenir, pero solo lo haremos cuando existan las condiciones de seguridad para los trabajadores”, enfatizó.