El proyecto tiene mucho que ver con los boyacenses porque mejorará la movilidad para los vehículos que ingresan y salen de Bogotá por el norte. La ANLA contó con un equipo técnico de profesionales de diferentes disciplinas: ingenieros civiles, ingenieros forestales, biólogo, comunicador, abogados y profesionales de valoración económica y compensaciones, lo que permitió realizar una evaluación técnica, rigurosa y oportuna.
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, después de la evaluación técnica e integral del Estudio de Impacto Ambiental y la información adicional presentada por Accesos Norte S.A.S., para el proyecto denominado ‘Mejoramiento y ampliación a una doble calzada de la Carrera Séptima entre la Calle 245 hasta el sector de La Caro, en jurisdicción del Distrito de Bogotá D.C. y el municipio de Chía, en el departamento de Cundinamarca – Unidad Funcional 1’, ha decidido otorgar la viabilidad ambiental al desarrollo de la obra.
La decisión de la ANLA se fundamenta en la evaluación técnica del EIA, en la valoración de las obras y actividades a desarrollar, del entorno del proyecto, de los posibles impactos ambientales y las medidas de manejo, compensación, monitoreo y seguimiento, que aplicarían al desarrollo de dicho proyecto vial. Es importante precisar, que contra la decisión de la Autoridad Nacional, procede el recurso de reposición.
Para la evaluación del proyecto, la ANLA contó con un equipo técnico de profesionales de diferentes disciplinas: ingenieros civiles, ingenieros forestales, biólogo, comunicador, abogados y profesionales de valoración económica y compensaciones, lo que permitió realizar una evaluación técnica, rigurosa y oportuna.
La segunda calzada, que será contigua a la ya existente, comprende la construcción de 4,89 kilómetros con las especificaciones definidas por el INVIAS para el nivel de esta vía, con dos retornos operacionales, uno ubicado antes y después del peaje, y otro al inicio y al final de la segunda calzada. Comprende también, la ampliación del peaje de tres a seis carriles, y las oficinas asociadas a su operación; así como la construcción de cinco puentes peatonales para atender los sitios de mayor afluencia de personas como son los colegios, viviendas e industrias, entre otros.
Por otro lado, una vez se estableció la afectación de 1,59 hectáreas en bosques y áreas seminaturales, debido a los impactos de las coberturas vegetales existentes por el desarrollo de colegios, viviendas, industrias y comercio, entre otros, la ANLA ha impuesto a Accesos Norte S.A.S, la compensación de 18,41 hectáreas con actividades de rehabilitación y siembra de especies nativas en sistemas degradados, mejorando con ello algunos servicios ecosistémicos existentes y deteriorados.