El gerente de Comfaboy explicó que esta decisión se tomó porque la entidad no está en capacidad de asumir las pérdidas que genera la EPS.
Fredy Garciaherreros creyó conveniente aclarar ciertas dudas antes de que se realizara la asamblea general de la Caja de Compensación Familiar Comfaboy el próximo viernes.
Una de las grandes inquietudes que asalta a los boyacenses es la liquidación de la EPS Comfaboy. A lo cual Garciaherreros afirmó que se trata de una decisión que no se tomó a la ligera y que se debe esencialmente a las pérdidas que está le viene generando a la caja de compensación.
“Hemos tomado nosotros varias medidas para poder buscar y evolucionar el tema de la salud, inclusive en alguna oportunidad la Superintendencia (salud) dictó una medida especial contra la EPS del régimen subsidiado y colocó un contralor, o sea como un interventor, para hacerle seguimiento a estos programas, que durante seis meses revisó y verificó el programa, y dejó un plan de acción para que de pronto mejoraran los temas administrativos. Pero el déficit era fiscal, era financiero; no administrativo. De cada 100 pesos que nos giran por afiliado, nos podemos gastar hasta 92 en costo médico y los restantes ocho en administración; nuestro costo médico está en 102, 103, 105 mensuales; o sea que en el costo médico estamos dando pérdidas mensualmente.
También le puede interesar:
>Se avecina duro golpe para la salud de los boyacenses
Ante la evidente pérdida económica se le cuestionó a Garciaherreros por qué no se había tomado la medida con anterioridad, el Gerente de Comfaboy aclaró que no se trató de una decisión que se tomó a la ligera, sino que se tenía contemplada desde mucho tiempo, “el consejo directivo estudió la medida, miró que se podía hacer, ante esa situación, esta administración presentó tres veces el retiro voluntario y el consejo lo aplazó mirando varias opciones”, indicó Garciaherreros.
Respecto a la preocupación de los 105 mil afiliados del régimen subsidiado, Garciaherreros hizo un llamado a la tranquilidad. “El sistema está organizado para que cuando sea el retiro voluntario, o sea retiro forzoso, inmediatamente, quince días antes no le gira a esta EPS, le giran a la nueva EPS, a la que se va el afiliado, y el afiliado pasa con el alto costo a la otra EPS, y en ningún momento se deja de atender a ese paciente. Pero fuera de eso, esos 105 mil afiliados no son de la caja, no son misionales nuestros, esos son protegidos por el sistema de salid, y pasan de una EPS a otra”. Sin embargo, Garciaherreros no hizo claridad de cómo se hará ese traspaso de ni más ni menos que 105 mil afiliados, ni cuánto tiempo tomará, ni a partir de cuándo se hará; en lo único que hizo énfasis fue en que “ningún paciente pasará un solo día, un solo minuto sin ser atendido”.
