El anuncio fue hecho por el presidente Duque desde el barrio El Pozón de Cartagena. El salario mínimo mensual para el próximo año será de $877.803, con un auxilio de transporte de $102.854, para un total de $980.657; el incremento es igual que el año pasado. La subida por decreto se da ante la imposibilidad de haber llegado a un acuerdo en la mesa de concertación.
Pero como el clima social está crispado ante las movilizaciones después del 21N, Duque dijo, enseguida, que “este año, después de haber hablado con el sector privado y con sectores políticos, hemos tomado la decisión de hacer un ejercicio, rápidamente, en el Congreso, para poder sacar adelante esa prima adicional que va a permitirnos en el año 2020 llegar al millón de pesos o más del millón de pesos para la gran mayoría de trabajadores de nuestro país”, lo cual equivale a que le prende una vela a dios y otra al diablo: congraciarse con “la opinión” y hacer el juego a las iniciativas del jefe de su partido que ha propuesta la tal “prima adicional”.
Otro argumento que busca hacer parecer extraordinaria la decisión, según Duque, es que considera que el aumento real del salario es del 2,12 por ciento con respecto a la inflación esperada para 2019, que el Banco de la República proyecta en 3,88%, siendo considerablemente superior a la inflación esperada para 2020, que es 3%. Y agrega el comunicado oficial de la presidencia: “esto significa un incremento de doce puntos porcentuales en los dos primeros años del Gobierno, que a su vez representan un incremento real acumulado de 4,83 por ciento (2,4% real en promedio anual), que es el mayor que se ha obtenido en cualquier Gobierno en sus primeros 2 años de mandato en los últimos 30 años”.
Estos argumentos en realidad no tienen gran sustento, dada la desconfianza de los ciudadanos frente a las cifras del Dane, las cuales contrastadas con lo que se observa empíricamente con los precios del supermercado y de las plazas de mercado, no resulta difícil concluir que en lo corrido de este año la totalidad de los precios de los artículos de primera necesidad han subido en cifras muy superiores, lo cual puede comprobar que la base de las afirmaciones del presidente no son más que demagogia propagandística para tratar de ocultar la realidad.
Las tarifas que se modifican con el incremento del salario mínimo
Así como sube el salario mínimo de cerca de dos millones de colombianos que lo devengan, desde enero primero también subirán algunos costos que se expresan en salarios mínimos vigentes.
Entre estos están las multas y los comparendos de tránsito, cuyo valor final será publicado por las entidades territoriales de tránsito y transporte. También subirán las tarifas de patios y grúas y el Seguro Obligatorio contra Accidentes de Tránsito (SOAT).
Subirán también, los servicios notariales, los aportes a salud y pensión y las cuotas moderadoras y copagos a las EPS, cuyas tarifas de estas últimas serán publicadas por el Ministerio de Salud y aumentarán teniendo en cuenta el salario mínimo como referencia y dependiendo del nivel de ingresos del contribuyente.
Otros costos, como arriendo y peajes, se incrementarán en la proporción que lo haga la inflación de 2019, dato que se conocerá durante la primera semana de enero y se proyecta en alrededor del 3,6 %.