El pueblo de Samacá en la discusión sobre la minería

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Más de 500 personas de la comunidad de Samacá se encuentran reunidas en el Auditorio Camsicá de la población, junto con la Agencia Nacional de Minería, Corpoboyacá y la alcaldía Municipal, analizando los impactos ambientales de la minería en la región, donde se considera que la explotación del carbón en las zonas de Páramo del complejo Rabanal está poniendo en riesgo la estabilidad y permanencia de las fuentes de agua, cuyos referentes son las represas Gachanecas y Teatinos, los sistemas de canales de riego y las viviendas de decenas de habitantes que se dice, sus casas pueden correr riesgo.

Escuchados los argumentos de los actores de la controversia se dice, por parte de los agricultores que, en efecto, la actividad minera sí ha afectado las fuentes hídricas superficiales y subterráneas y los sistemas de conducción del agua. A su turno, el vicepresidente de la Agénciale Nación de Minería expone que según la información de la que dispone la entidad, no se ha comprobado hasta ahora ningún tipo de afectación ni a las represas  ni a los sistemas de conducción del agua para el Distrito de Riego.

Para los empresarios, la prioridad de su actividad es proteger estos ecosistemas y se comprometen a respetar las decisiones legales y apoyo a la protección de las distintas  propuestas que surgen para mejorar las condiciones de protección de las zonas de Páramo. De otro lado, el alcalde Wilson Castiblanco Gil asegura que su compromiso es con los 25 mil habitantes de la jurisdicción.

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En la medida que se avanza en la discusión se están caldeando los ánimos pues las posiciones se radicalizan en pro y en contra de los distintos interese. El asunto no es fácil

[Noticia en desarrollo]

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