A menos de dos meses de la apertura del nuevo centro comercial que la organización Viva Éxito, ha puesto en funcionamiento en el norte de la ciudad, sobre la Avenida Universitaria. Sumadas las inversiones en el inmueble se dice que superan los 170 mil millones de pesos, una cifra que quizá es la más alta invertida en Tunja como resultado del desarrollo de cualquier proyecto público o privado, lo cual, sin duda, dice mucho de la importancia de la ciudad y la confianza que inspira para los inversionistas, quienes deben calcular un promisorio futuro.
Entonces, la confianza del inversionista inicial y la vinculación de las múltiples marcas que llegaron, es señal inequívoca de que la capital boyacense atraviesa por uno de sus mejores momentos en el crecimiento y la expansión urbanística, su dinámica poblacional y comercial, lo cual también es muy positivo en relación con la plena oferta de bienes y servicios que ya no hay que ir a otra parte a conseguir, sino que están aquí.
Sin embargo, las cosas podrían ser mejor hora y hacia el futuro, con una ciudad amable, transitable, sostenible y sustentable ambientalmente; es decir, Tunja podría ser la ciudad ideal, con menos de medio millón de habitantes, con todos los servicios, los mejores espacios públicos, reconocidas marcas, los sitios más atractivos. En una palabra. El mejor sitio para vivir en el altiplano cundiboyacense.
Esto se hubiese podido lograr en tan solo 25 años, que es el tiempo que ha tardado el crecimiento y desarrollo de la ciudad moderna, es decir la urbanización de las tierras del Valle, a lado y lado del Río Jordán. Pero no fue así; la suma de la incapacidad del sector privado de ver el verdadero potencial de la ciudad, la indiferencia y la inercia de las distintas administraciones hasta hoy, que se convirtió en la mezquindad de unos y otros, entre otros factores hacen que ahora sea casi imposible enderezar las equivocaciones y hacer de Tunja “el lugar para hacer perpetua casa”, tal como lo propuso, desde los comienzos, don Juan de Castellanos.
Hace apenas 25 años se tuvo la certeza de que las tierras de lo que entonces se llamaba la zona del valle, plana y lacustre, hasta ahora, sería el espacio del desarrollo de la Tunja Moderna y cosmopolita que todos soñaban, que se quería que complementara a la ciudad tradicional de blasones y toisón.
Entonces surgió la Avenida Universitaria como la primera propuesta para desarrollar el extenso territorio del Valle. Y ahí también surgieron los primeros problemas, cuando debieron ser los primeros beneficios. Los dueños de la tierra eran menos de diez, ya que el valle correspondía a las haciendas ganaderas, que se habían consolidado con las aguas residuales que portaban elementos fertilizantes para mejorar las pasturas, pero que ya habían matado al río. Así que cuando se dijo que ya no se venderían por fanegadas sino por metros y no seguirían las vacas, sino que surgirían los edificios, era evidente que los potenciales económicos cambiaban de manera fantástica.
Por eso se pensó que en la lógica del capital el gran desarrollo moderno del sector era cuestión de tiempo a partir de ejes viales, peatonales y ambientales que valorizaran los proyectos que darían paso a la ciudad del siglo XXI, que podría ser alternativa de equilibrio en altiplano cundiboyacense para mitigar en algo el extremo urbanismo de la Sabana de Bogotá.
Tunja fue planteada como ciudad universitaria, desde la mitad del siglo pasado, y hace 23 años, la misma idea la retomó Manuel Arias, iniciador de la Avenida Universitaria, de ahí el nombre de la vía; luego, otros han cambiado un poco el concepto y aclaman el más atractivo nombre de ciudad del conocimiento, lo cual no se ha cumplido del todo pero que en esta dirección se han dado pasos importantes. Hoy, Tunja es la cabecera del corredor industrial con Duitama y Sogamoso, cada vez más cerca a Bogotá, unida por la doble Calzada y una línea férrea que puede convertirse en extraordinario eje de movilidad. Con todas estas potencialidades, se pensó incluso que en las dos primeras décadas de este siglo la ciudad alcanzara el millón de habitantes.
Sin embargo la realidad ha traído otro escenario: el desarrollo del Valle se convirtió en un proceso anárquico, alrededor de una modesta vía de dos calzadas que hoy tiene especificaciones menores a la Avenida Norte que se diseñó hace 70 años, pero que alberga los principales desarrollos que han sucedido en apenas un poco más de diez años, y que es donde hoy se encuentra el nuevo centro comercial cuyo acceso ya está colapsado, no siendo la culpa de nadie más, para este caso específico, que de los mismos promotores y dueños del proyecto. Al ver este resultado, es de no creer que los más poderosos intermediarios de productos de consumo masivo, cometan semejante error y abran sus almacenes sin la garantía de una movilidad segura y fluida para sus clientes. El tener en sus manos el éxito, no los salva de su torpeza. Por lo menos había que garantizar la conectividad de la Avenida Norte con la Universitaria y estas con la doble Calzada, por otra vía distinta a la entrada de Green Hills y del Paseo de la gobernación.
Era cuestión de coordinarlo con la Administración, y en vez de pedir exención de impuestos, lo lógico era negociar equitativamente la solución de la movilidad incluidos los andenes vecinos en el sector, los cuales son otro desastre que tiene una solución fácil y barata.
Y ahora que las cosas están hechas y la ‘embarrada’ inevitable, se espera que los dueños y administradores del establecimiento que son a su vez los autores del disparate no se les ocurra pedir la solución a la Administración Municipal (claro que esto tampoco le quita la responsabilidad a la alcaldía por no haber exigido las soluciones a tiempo y suficientes), para que sea con los impuestos de todos los tunjanos con los que se le dé solución al problema. Así que el Centro Comercial tiene que adecuar y financiar estas deficiencias, si es que quieren que su Éxito, en ambos sentidos, siga. Desde luego que nada los salva de ser los autores de la chambonada del año. Ojalá la junta directiva de esa organización premie en consecuencia a los genios del proceso. Y si esas genialidades son de la propia directiva entonces son ellos los ganadores al premio mayor por la inaudita chambonada.
El trancon se debe unicamente a los mal parqueados que estan despues de la foto qe usted tomo ellos hicieron un carril propiobde acceso al centro comercial, ademas tomo la foto el 24 de diciembre en donde hasta el Sanadresito estab a reventar… imparcialidad?
Que chambonada de articulo la chambonada es de la administración actual las anteriores y de los Tunjanos por no exigir. Como es posible que la ciudad capital no tenga vías, tiene un rezago de décadas. Por ejemplo la autopista norte esta concesionada y le hace mantenimiento solarte y solarte lo mismo la avenida circunvalar que conecta a green hills. Solo las mismas vias de siempre de norte a sur y sur a norte de oriente a occidente nada. Que se pongan las pilas los de la administración bastante robaron a los Tunjanos con el impuesto predial para no ver nada de inversiones. Entonces se propone con el articulo es que el sector privado a parte de generar empleos en construcción y en funcionamiento de sus inversiones nos hagan las vias y andenes de nuestros frentes? mmmmm faltaba mas.
Ok
Increíble que para semejante proyecto y empresa que llegó a Tunja se le tilde de «Chambonada», cuando es uno de los ejes de desarrollo y progreso para la Ciudad, toda vez que genera empleo y status a sus pobladores. Que la problemática de movilidad como toda metrópoli no le es ajena y que es causa de la falta de planeación de décadas atrás, más no se le puede atribuir a este proyecto. Este medio de comunicación debería tener otra perspectiva frente al desarrollo de Tunja y no necesariamente sacar raiting con este tipo de publicaciones. Porque no dejamos ya tanta criticadera y somos más proactivos y positivos. Nada nos gusta. Así es con todo. Se nos ve más bien la amargura y envidia. Todo es así. Que malo de la Plaza de Bolívar, que mal el Gobierno Nacional, que mal el terminal, que mal todo, que todo mundo roba, que todo mundo es corrupto……ya dejemos tanto pesimismo y más bien aportemos al menos con buena energía.
Este periódico solo desprestigia a los Tunjanos. No solo con esta mala redacción sino con las anteriores, solo hace que la gente de afuera nos tilde de envidiosos y egoístas , sea un periódico con sentido crítico y no escriba por escribir artículos amarillistas. Personalmente es desagradable leer siempre estas redacciones. Analice , tenga sentido de pertenencia por el departamento, infórmese y así podrá generar mejores artículos que realmente sean líderes dentro del periodismo Boyacense.
Destacó la intención de llamar la atención de la administración del centro comercial y la administración de Tunja para resolver el problema de movilidad que se ha suscitado por la apertura y puesta en funcionamiento del Viva Éxito, sin embargo la redacción del artículo es ”súper jarta” parece una novela corta de terror con pésima descripción de los personajes.
Este artículo, refleja la cambiada de períodico que existe y la mala redacción que tiene, que perdida de tiempo leer este artículo!
Chambón el artículo, Falta sentido de pertenencia por la ciudad.
El articulo falla en su enfoque… pero que le vamos a hacer. La chambonada es poner un policia acostado justo debajo del semáforo que queda frente al centro comercial. Con todo y lo insuficiente que es la vía, puede mejorar la movilidad, la semaforización, los reductores de velocidad y los cruces que den acceso a ambos lados de la vía, pues hoy la vía obliga a ir hasta el round point, aumentando el tráfico y uso de combustible.