El municipio de la provincia Ricaurte se posiciona como uno de los atractivos turísticos más importante del departamento.
Hablar de Ráquira es hacer mención a una tierra de vocación artesanal. Por ejemplo, la alfarería representa cerca de un 80% de las actividades económicas, haciendo que, dicha jurisdicción, sea conocida a nivel regional y nacional como una ‘cuna de artistas’. Sin embargo, no solo el talento creativo sobresale, también se destaca el trabajo y esfuerzo de los artesanos que, por medio de sus piezas, plasman todo su amor y entrega por esta labor.
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Sin embargo, la producción alfarera no es lo que netamente especial a Ráquira, también figura la música y el arte, y muestra de ello, es la estampa del maestro Jorge Velosa, conocido a nivel mundial como el padre de la música carranguera. Velosa nació en una vereda de este municipio el 1949 y hasta hoy día, todo tiene que ver con él en territorio raquireño.
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Junto a estos dos escenarios figura la gastronomía. En estas tierras como en otras del departamento, todavía se conserva el sabor y la tradición campesina. Es por eso que, en las plazas, estaderos y restaurantes, es normal encontrar gallina sudada, arroz con fines (algunos órganos del pollo o la gallina), arepas, fritanga, envueltos y otras delicias. Pero, hay un aperitivo especial: la longaniza.
Si bien, la longaniza es famosa por fabricarse en Sutamarchán, municipios como Ráquira, le apuestan a la producción de este embutido hecho a base de carne de cerdo. En un famoso restaurante de la localidad, sirven la longaniza bien asada y acompaña con papa criolla y ají, se convierte en un regalo para los amantes de la buena gastronomía.
Así que no pierda la pierda la oportunidad de conocer parte de la gastronomía boyacense y lo puede hacer en Ráquira, tierra de gente amable y que lo espera con los brazos abiertos.
