Es la pregunta que se hacen muchos observadores en Tunja al analizar lo que está pasando con el cambio en la Secretaría de Contratación de Tunja, de donde salió la abogada y experta en asuntos de contratación, Johana Salomón, quien ha sido reemplazada por otra abogada e Ingeniera de Sistemas, pero que es hermana de César Cruz, un personaje que ha estado en el radar de la contratación municipal en los últimos ocho años y de quien se dice que es algo así como el poder detrás del trono en la actual administración de Pablo Emilio Cepeda.
Johana Salomón, quien es abogada del Externado, especialista en contratación estatal y derecho administrativo y con maestría en gobierno, y que se ha desempeñado como catedrática de la Universidad Santo Tomás (USTA), es nombrada Secretaria de Contratación, formando parte del primer gabinete de Cepeda Novoa dadas sus condiciones y conocimientos en este campo, por lo que se dedica, en principio, a ‘poner la casa en orden’, con arreglo estricto a las normas vigentes, ya que venía de Bogotá de la gerencia de su propia oficina, especializada en asesorías en contratación pública y privada, y procesos contractuales.
La idea de Salomón era ayudarle al alcalde Pablo Cepeda en la precisión de la contratación y proteger la administración de los posibles errores. Sin embargo, tratar de cuidar la espalda del alcalde no resultó tarea fácil. Desde el comienzo hubo problemas dadas las prevenciones que la funcionaria despertó por las exigencias y la meticulosidad que puso a su trabajo.
Las discrepancias se sucedieron durante todo 2016, cuando se trató de adjudicar varios contratos a empresas determinadas sin el cumplimiento de los procedimientos requeridos como por ejemplo, licitaciones; ante la negativa de la Oficina de Contratación para amoldarse a estas pretensiones algunos funcionarios e interesados en la Administración no quedaron satisfechos.
El asunto con Salomón es que ella dejó claro desde el primer momento que no venía a firmar sino a trabajar porque todo saliera bien, lo cual fue interpretado por sus críticos como acciones para trancar y obstaculizar ‘la buena marcha de la contratación’, cuando lo que siempre buscó fue que se hicieran las cosas bien, que todo proyecto tuviera los estudios previos debidamente sustentados y que las solicitudes de las demás secretarías cumplieran con todos los requisitos legales.
La situación se tornó tensa en varios momentos cuando a la funcionaria, por el motivo que fuere, se le exigió que tenía que firmar sin mayores análisis, poniendo en riesgo la legalidad de los actos, a lo cual, se dice, ella se negó de plano.
Incluso varios concejales también rechazaron la conducta estricta de Johana por dar cumplimiento a las normas más que a sus peticiones y exigencias; EL DIARIO también conoció que otro tanto sucedió con algunos colegas de gabinete quienes ‘se pasan de juristas (sin serlo) y expertos en contratación y todos los temas de la administración’. Como anécdota, se sabe que un asesor de primer plano sostiene que todo se puede, a lo cual la funcionaria siempre le dijo que no.
Sin embargo, la situación se tornó insostenible para Salomón en diciembre pasado cuando la Administración decidió adicionar a toda prisa algunos contratos muy importantes y valiosos sin las debidas justificaciones, contratos que valen varios miles de millones.
La nueva Secretaria de Contratación
En cuanto a la nueva Secretaria de Contratación, Lesly Rocío Cruz Chacón, aún no se ha posesionado dado que viene de un cargo en Bogotá, en el Consejo de Estado, en donde habría hecho una solicitud de licencia no remunerada, la cual apenas se estaría tramitando, debido a que la vacancia judicial paraliza las actividades en el final y comienzo de año.
Este nombramiento, ya anunciado, desde el primer momento suscitó suspicacias y reparos de fondo, por lo que la polémica no se ha hecho esperar y los reparos a Pablo Cepeda han aumentado en estos días, dado que esta señora es hermana de César Cruz Chacón, un personaje duramente criticado por sus vínculos y antecedentes en materias a de contratación, desde administraciones pasadas de Tunja y en algunos municipios del departamento.
Cesar Cruz, considerado el poder detrás del trono en la alcaldía de Cepeda, ha sido cuestionado, desde hace años en Tunja por su participación en un contrato de intervención en el Bosque de la República sobre el área del denominado Paredón de los Martínez, donde se invirtieron, en tiempos de las administraciones de Benigno Hernán Díaz y Arturo Montejo, 1300 millones de pesos y a la fecha nadie ha dado explicación satisfactoria sobre esos recursos que se consideran perdidos y que manejó Cruz Chacón.
Por otra parte, este personaje ha sido cuestionado por su reiterada conducta de presentase a diversos concursos de licitaciones y contratos con documentos no ciertos o informaciones que se han juzgado falsas, donde afirma que es ingeniero, pero que al verificarse su trayectoria en el, Copnia, El Consejo Profesional Nacional de Ingeniería, no aparecen registros de sus competencias en ninguna de las áreas técnicas que certifica esa entidad.