A 19 de agosto de 2017 el avance de obra es del 78,23%, una vez más se teme que el plazo fijado para la terminación de la obra tenga que modificarse.
La construcción de la nueva Terminal de Transportes de Tunja se ha convertido en un dolor de cabeza tanto para la Administración Municipal, como para la Administración Departamental, y para la misma ciudadanía.
La mesa técnica correspondiente al mes de agosto dejó en evidencia que la obra avanza, pero no tal y como se tenía presupuestado. “Hoy, aproximadamente, la obra debería estar llegando al 90%. Tenemos una situación técnica que se explica en la mesa, y es que no han ingresado oficialmente los recursos del empréstito, y cuando estos recursos ingresen automáticamente el avance va a disminuir de acuerdo a esa compensación de dinero. Si bien es cierto que hay un retraso, hay que decir que ya se le ve forma al terminal; ya se ven más trabajadores en la obra, ya se ve más disposición. Pero de acuerdo a esto que notamos el día de ayer, va a ser muy complicado cumplir la fecha del 30 de noviembre para la culminación del proyecto”, comentó el concejal de Tunja, Anderson Mendivelso.
Pero los plazos de entrega de la obra no son la única preocupación alrededor de la nueva Terminal de Transporte. A la fecha, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) no ha expedido el permiso para la construcción del carril de aceleración y desaceleración sobre la doble calzada.
La obtención de dicho permiso se ha convertido en otra piedra en el zapato para los boyacenses que anhelan ver terminada y en funcionamiento su nueva terminal de transportes. Desde la ANI han asegurado que dicho permiso no se expedirá hasta que en la capital boyacense se realice un estudio de movilidad. Una vez que se cuente con tal permiso por parte de la ANI, el contratista demorará tres meses más en la construcción y adecuación de dicho carril.
La operación y administración de la terminal, que recientemente ha sido tema de debate y de discusión por parte de varios medios regionales, y de la ciudadanía, es otro obstáculo para la terminación del terminal. Desde el Departamento Nacional de Planeación han decidido que no girarán los recursos de regalías hasta que se resuelva ese tema. Para completar la cadena de infortunios, es necesario recordar que la discusión por la administración del terminal ha llenado horas de programas radiales y páginas de periódicos, pero en el Cabildo Municipal, ni siquiera ha empezado a discutirse este tema.
Y con la falta de recursos el problema parece crecer cada vez más. La mesa técnica de agosto sacó a la luz la denuncia del contratista, quien asegura que desde febrero no se le giran recursos, razón por la cual no tiene como continuar los trabajos y la obra podría llegar a suspenderse. “El señor contratista, el ingeniero Vivas, ayer manifestó que desde el mes de febrero no ha recibido recursos, que él ya ha invertido en la obra más de 12 mil millones de pesos, y que si no se le hace un giro pronto, no va a tener el músculo financiero porque ya ha invertido demasiado y esto podría conllevar a la suspensión de trabajos por parte del contratista”, indicó Anderson Mendivelso.