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El boyacense Jaime Raúl Salamanca generó una nueva polémica por referirse a asuntos íntimos durante una dinámica con sus seguidores en la red social Instagram. Le cuestionan que se ocupe de esos temas mientras hay una intensa guerra en el Catatumbo.
Definitivamente la de Jaime Raúl Salamanca ha sido una presidencia distinta de la Cámara de Representantes.
Muchos lo ven como un bonachón en su comportamiento privado, con algunos aires de ‘mandamás’ cuando asume su rol de Presidente de la Cámara, otras resaltan lo ‘desabrochado’ que es para responder a las preguntas de los periodistas y hay quienes recuerdan que, como no es habitual en el Congreso, Salamanca acostumbra a llegar al recinto en tenis, jean, sudadera y camiseta.
Por esa forma ‘tan confianzuda’ de tratar a sus colegas congresistas, de responder entrevistas y de comportarse es que no es raro que Salamanca haya decidido responder, a través de Instagram, una serie de preguntas personales entre las cuales se incluyeron varias que se referían a su sexualidad.
Ocurrió el martes 21 de enero en la noche y las respuesta que Salamanca dio generaron noticia nacional y muchas reacciones a favor y contra en redes sociales.
El portal de Internet Infobae dijo que esa noche Salamanca compartió una imagen en la que invitaba a sus seguidores a elegir un número del 1 al 59, cada uno asociado a una pregunta previamente preparada. Entre las preguntas figuraban temas generales como su comida favorita, su signo zodiacal, rumores sobre él y su altura; sin embargo, una pregunta que abordó un aspecto íntimo generó el momento más polémico de la actividad.
Un seguidor le preguntó: “¿Cuánto le mide?”, en clara referencia al tamaño de su órgano reproductor. Salamanca respondió con la frase: “Poquito, pero ahí me bandeo”, acompañada de un emoji de berenjena, lo cual intensificó la controversia.
Dice Infobae que la publicación rápidamente se viralizó, y la reacción de los usuarios en redes sociales fue inmediata. Muchos calificaron la respuesta como inapropiada para un funcionario de alto rango, mientras que otros argumentaron que se trataba de un ámbito privado que no debería generar tanta atención. No obstante, la crítica principal giró en torno a la percepción de que este tipo de comentarios no eran compatibles con la posición que el congresista ocupa como líder legislativo.
“El presidente de la Cámara generó una oleada de críticas, pero respondió firmemente a los señalamientos, argumentando que es una persona dedicada a su trabajo y que sus respuestas incomodaron a quienes consideró como ‘dobles moralistas’.
Una de las interacciones más comentadas ocurrió cuando un usuario eligió el número 47, que correspondía a la pregunta: “Un rumor sobre ti”. Salamanca, con un tono aparentemente humorístico, respondió con una imagen de su rostro acompañada del texto: “Que soy un polvazo, jajajaja. Mentiras. Qué no me han dicho desde que soy político”.
Este comentario, que hacía alusión a una insinuación íntima, rápidamente se volvió viral, dividiendo las opiniones en redes sociales. Mientras algunos consideraron la respuesta irreverente y fuera de lugar para alguien en su posición, otros la calificaron como un gesto de cercanía y humor que humaniza al congresista.
La revista Semana, que ha sido bastante rigurosa, por no decir dura con la labor del Congresista, tituló:
“Mientras la guerra azota al Catatumbo, el presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, está dedicado a responder preguntas sexuales en sus redes sociales”.
“El presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, -dice Semana- sorprendió a sus seguidores de Instagram con unas respuestas salidas de tono, con carga sexual, que dejaron sorprendido a más de uno.
A ese artículo el Presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, le respondió en la red social X:
“Hombre. Sean serios! Que pendejada la doble moral de este país. Ahora debo justificar que hago en mi tiempo libre! No jodas! Soy re trabajador y comprometido con el país. Y si también soy una persona común y corriente. Con tantas cosas tan importantes que pensar y salen con eso!”.
Y después escribió: “Les propongo más bien que encaminen sus energías en recoger recursos para ayudar a los niños y las mujeres del Catatumbo. Ellos necesitan de nosotros. Qué falta del todo en serio!”.
