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En Sogamoso no se habla de otra cosa que de la niña de 11 años que desapareció en la madrugada del 25 de diciembre. Las autoridades hallaron el domingo un cuerpo e indagan si se trata de la pequeña, que es lo más presumible.
Aunque Medicina Legal de la Fiscalía podría dar a conocer hoy un reporte oficial sobre la identidad del cuerpo sin vida encontrado en un paraje rural de Sogamoso, su familia y las autoridades temen que se trate de Sara Michel Vargas Vega, la niña de 11 años que desapareció desde el pasado 25 de diciembre.
El cuerpo sin vida de una menor de edad, en avanzado estado de descomposición, fue encontrado el domingo sepultado relativamente cerca del sector de donde se reportó la desaparición de Sara Michel Vargas Vega.
El cadáver lo hallaron en el sector de Venecia, que queda cerca de la vereda Vanegas, de donde desapareció hace 19 días la niña Sara Michel.
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Lo que ocurrió en la madrugada de la Navidad con la menor es objeto de investigación por parte de las autoridades. Todo ocurrió después cuando la niña y su familia regresaban a Sogamoso luego de las celebraciones que se desarrollaron en Firavitoba.
En declaraciones para el periódico EL TIEMPO, una tía de la menor contó que los padres de la niña tuvieron una discusión y luego se percataron de su desaparición.
«Mi hermana (la mamá) dice que vio cuando abrieron el portón y la niña se salió», relató la tía de la menor al medio de comunicación. Desde ese momento, la niña no volvió a ser vista y casi dos semanas después continuaba su búsqueda.
Desde esa madrugada la familia estuvo buscando a la menor con ayuda de las autoridades. Sin embargo, los esfuerzos no dieron frutos durante casi tres semanas.
Según el reporte de las autoridades, el cuerpo fue encontrado el domingo en avanzado estado de descomposición y hasta ayer se esperaba la autopsia para dar con la identidad de la víctima.
La menor, que según la descripción que le dio su familia a la policía, mide 1.47 m, es delgada, de cabello negro, cejas pobladas y una cicatriz pequeña en una de ellas; vestía un jean negro, zapatos blancos con rosa y tenía una tula al momento de su desaparición.
Según la familia, el aviso a las autoridades se hizo el 25 de diciembre. Pasados los días, la Alcaldía de Sogamoso se unió a la búsqueda, junto a la Cruz Roja de Tunja y Sogamoso adelantaron acciones que puedan dar con el paradero de la niña, pero el macabro hallazgo de los últimos días significaría un lamentable final.
A pesar de que no se ha confirmado la identidad de la persona encontrada muerta, las autoridades ya dijeron que el cuerpo, con signos de tortura y desmembramiento, presenta rasgos y características similares a la niña desaparecida. La familia de Sara Michel Vargas Vega continúa con la búsqueda y guarda la esperanza de que el cuerpo hallado no pertenezca a ella.
La identidad del cuerpo hallado en horas de la tarde del domingo 12, tendría que ser analizado por un experto en morfología, quien sería el encargado de cotejar la tipología de los restos óseos hallados con las características de sexo y edad de la menor.
Blanca Sierra, abuela de Sarita, en diálogo con Noticias RCN, dijo que mantiene la esperanza de que el cuerpo en avanzado estado de descomposición hallado en las últimas horas no sea el de su nieta.
“Que ojalá no fuera Sara, que ojalá no fuera la que encontraron, que nos digan que no es ella”, indicó la abuela de la niña.
El comandante de la Policía de Boyacá, Fredy Barbosa, explicó que, hasta el momento, no se puede confirmar que se trata del cuerpo de la niña desaparecida: “Desafortunadamente, por las características de la tipografía y, obviamente, de lo que hemos encontrado no podemos establecer qué originó las causas de la muerte y de qué se trate de la menor, todavía no podemos decir que es la menor, estamos en un proceso de identificación».
Sin embargo, en la escena fueron encontrados algunos elementos y prendas de vestir que coincidirían con los de Sarita.
