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Este viernes, 1 de noviembre, Tunja se convertirá en el epicentro de un desfile para celebrar el inicio del Festival Internacional de la Cultura Campesina (FICC). En homenaje al campo y su inquebrantable aporte a la identidad de Boyacá, más de 4.500 personas se unirán en un recorrido colmado de color, música y simbolismo. Este desfile inaugural, que se prevé como el más grande en la historia del festival, pretende no solo deleitar a los espectadores, sino también rendir tributo a las raíces campesinas.
El desfile arrancará a las 2:00 pm desde el Bosque de la República y recorrerá puntos estratégicos de la ciudad. La ruta contempla lugares emblemáticos como la carrera décima y la Plaza de Bolívar, así como la calle 19 y la Plazoleta de San Francisco, donde las comparsas, carrozas y grupos musicales se entrelazarán con la arquitectura y el paisaje tunjano, dando lugar a una experiencia sensorial única. Esta ambiciosa organización invita a los asistentes a seguir el recorrido por las calles de la ciudad, rememorando y celebrando la esencia de los campesinos.
Entre las principales novedades se encuentran las comparsas y carrozas inspiradas en momentos fundamentales del ciclo campesino: la siembra, las artes y oficios, la cosecha y la fiesta. Estas representaciones, producto de un cuidadoso trabajo artístico, fueron seleccionadas a través de la carpeta de estímulos de la Secretaría de Cultura de Boyacá, un espacio que valora y promueve el talento local. A lo largo del recorrido, los asistentes disfrutarán de agrupaciones musicales que brindarán un acompañamiento sonoro tradicional y festivo, mientras que la transmisión en vivo a través de las redes del FICC permitirá que este evento histórico llegue a todos los rincones del departamento y más allá.
Este año, el FICC apuesta a más que un evento cultural; es una manifestación de orgullo por el campesino, un sector que representa la tenacidad y la riqueza cultural de Boyacá. En cada paso, melodía y color, se reflejan las tradiciones, los desafíos y la celebración de quienes trabajan la tierra y mantienen vivas las costumbres.
Con un acto inaugural que promete ser inolvidable, el FICC reafirma su compromiso con el campo y da inicio a una fiesta que resonará en los corazones boyacenses y turistas.
